La Fiscalía de Murcia investiga a los altos cargos que se colaron para recibir la vacuna del Covid
La Fiscalía de Murcia ha abierto Diligencias de Investigación Penal para investigar si pudiera haber alguna repercusión legal que afecte a las personas que se han ‘colado’, y se han vacunado contra el coronavirus mucho antes de lo que les corresponde. Esta es la primera investigación del Ministerio Público que se abre en España, pero podría no ser la última, pues ha habido alcaldes, consejeros y altos cargos que se han saltado el calendario de vacunación en diversas comunidades.
En el caso de Murcia, bajo sospecha se encuentran varios alcaldes, el ya ex consejero de Sanidad, Manuel Villegas, así como más de 400 personas de la Consejería de Sanidad se vacunaron por delante de aquellos a los que sí que los correspondía recibir la primera dosis de la vacuna: ancianos en residencias y personal sanitario de primera línea.
La denuncia, según ha adelantado La Sexta, la interpuso el PSOE de la región. Entre los delitos que el Ministerio Público investiga si se ha podido cometer un delito de prevaricación. Esta investigación se une a otra anunciada por la portavoz del Gobierno murciano y coordinadora de Ciudadanos en la Región, Ana Martínez Vidal, quien anunció este domingo que su Gobierno pondrá en marcha una comisión de investigación en la Asamblea Regional para dirimir responsabilidades políticas.
Según ha informado La Opinión de Murcia, la Fiscalía solicitará toda la información relativa a estos hechos al departamento de Salud. En cuanto a qué tipo de información pedirá, por el momento, desde el Ministerio Público pedirán todo lo referido a la vacunación masiva del personal que trabaja en las distintas sedes administrativas de la Consejería y del Servicio Murciano de Salud.
Las DIP abiertas para esclarecer, penalmente hablando, lo sucedido será la primera piedra en el camino a la que se enfrentará el nuevo consejero de Salud, Juan José Pedreño.
Otras comunidades
Pero la murciana no es la única comunidad autónoma que se ha visto afectada por esta vacunaciones VIP. Euskadi, donde han dimitido dos directores de hospital del PNV; la Comunidad Valenciana, con diversos alcaldes saltándose el protocolo; Cataluña o Mallorca, donde el obispo Sebastià Taltavull, se vacunó colándose en una residencia de ancianos curas, tal como ha publicado en exclusiva OKDIARIO, son solo algunos de los ejemplos que podrían acabar en los juzgados de toda España.
En la Comunidad Valenciana, por ejemplo, el matrimonio socialista formado por los alcaldes de El Verger y Els Poblets, Ximo Coll y Carolina Vives, se vacunaron para, según su versión, «aprovechar las dosis que habían sobrado». Y el alcalde de Rafelbunyol, Fran López, argumentó que lo había hecho «para ayudar a dar una sensación de confianza y seguridad a la ciudadanía».
Más denuncias
De hecho, la denuncia de Murcia no es la primera que ha entrado en una Fiscalía. Un abogado del País Vasco también ha interpuesto una contra los dos directores de hospital que recibieron la vacuna sin corresponderles. En este caso, Eduardo Maiz y José Luis Sabas, dos veteranos gestores del partido nacionalista, recibieron en los hospitales de Basurto y de Santa María la primera dosis de Moderna. Tras hacerse público, ambos dimitieron. Por el momento, no se sabe todavía la decisión de la Fiscalía vasca respecto de la denuncia recibida contra los ex directores de los hospitales.
Más llamativo si cabe es lo sucedido con el consejero de Sanidad de Ceuta, Javier Guerrero, quien tras colarse, y no dimitir, afirmó: «Yo no quería vacunarme, a mí no me gustan las vacunas, pero mis técnicos me lo recomendaron y me lo pidieron, me dijeron que si no lo hacía ellos tampoco, también por mi vulnerabilidad con mi diabetes, mi corazón y mi tensión».
Consecuencias
En cuanto a las consecuencias para los que se han saltado el protocolo de vacunación, más allá de las penales, ya hay varias comunidades que afirman que no les pondrán la segunda dosis que les tocaría en tres semanas. Esta medida no está exenta de polémica, pues hay quien dice que es tirar la primera dosis administrada para dentro de unos meses, cuando les corresponda, volver a inyectarles otras dos dosis.
Sin embargo, otras voces dicen que ponerles la segunda dosis supondría un premio para aquellos, que en lugar de dar ejemplo, lo que han hecho es no pensar en los más vulnerables y en aquellos que se enfrentan directamente al virus, los sanitarios. Y que por esa razón no se les debe administrar la segunda dosis. por el momento, pese a las afirmaciones, todavía no se ha tomado una decisión con respecto a los vacunados VIP.