Extremadura abre colegios con los pupitres de los niños de Primaria a sólo 50 centímetros de distancia
Los padres de un colegio público de Badajoz (Extremadura) han comprobado con preocupación que las medidas de seguridad ante el Covid en el centro de cara al inicio del curso escolar el próximo 10 de septiembre distan mucho de las aprobadas por el Gobierno central. Los pupitres están separados a apenas medio metro de distancia y las clases acogerán el mismo número de alumnos que antes de la pandemia.
La vuelta al cole en plena segunda oleada del coronavirus en España se ha convertido en un quebradero de cabeza para todo el sector educativo. Y en especial para los padres, ya que cualquier incidencia en el centro de sus hijos les afectará a ellos en el plano profesional ante posibles cuarentenas obligatorias. La situación es aún más preocupante en algunos centros, donde los padres han podido comprobar con sus propios ojos que las medidas de seguridad implantadas no cumplen los estándares básicos marcados por el Ministerio de Educación.
Es el caso del colegio público Las Vaguadas de Badajoz donde, tras una reunión preparatoria entre docentes y padres, éstos pudieron echar una ojeada al estado de las aulas ya listas para acoger de vuelta a los alumnos. Lo que vieron, y describen a OKDIARIO, les ha dejado profundamente inquietos: los pupitres que ocuparan sus hijos se encuentran separados a una distancia de aproximadamente 50 centímetros.
Esta distancia, a todas luces insuficiente, está muy lejos de los 1,5 metros mínimos exigidos por los protocolos que aprobó la ministra de Educación, Isabel Celaá, tras acordarlos con el resto de comunidades autónomas. En el protocolo interno de contingencias para el curso 2020/2021 del centro, sin embargo, se establece que todos los docentes deberán asegurarse de que «la distribución del aula permite mantener la distancia establecida de 2 metros entre todos los asistentes a la clase».
La normativa autonómica, plasmada en el ‘Protocolo de nueva normalidad educativa», también contempla el distanciamiento social mínimo en las aulas extremeñas: «se deben respetar, con carácter general, una distancia interpersonal de seguridad de 1,5 metros».
Según relatan a OKDIARIO padres de alumnos de este centro, han puesto en conocimiento de la dirección del centro estas irregularidades aunque, hasta el momento, no han recibido respuesta.
25 niños por clase
Recuerdan que los niños deberán estar «5 horas diarias» en esa disposición en aulas con 25 niños, el mismo aforo que tenían las clases antes de que el pasado curso se suspendieran por la pandemia. Denuncian, además, que «no se han contratado profesores de refuerzo, ni limpiadores, ni monitores de comedor». «Tan sólo se ha rebajado la ratio (alumnos por clase) en infantil», explican.
Por ello, han reclamado al centro la instalación de otras medidas que permitan aumentar la seguridad sanitaria de las aulas en caso de que no se pueda asegurar la distancia. Proponen, por ejemplo, la instalación de mamparas. Sin embargo, siguen sin respuestas.
«Esto significa que si entra el virus en la clase de mi hijo, dan por hecho que se contagiarán todos y sólo intentan que el virus no salte de un grupo a otro. Nos convierten en ‘convivientes’ a 25 familias», aseguran los padres a OKDIARIO.
Vara y la «rutina»
Mientras tanto, el presidente del Gobierno extremeño, Guillermo Fernández Vara, considera que la vuelta al cole conlleva un efecto positivo de cara al descenso de los contagios. Según explicó Vara tras la conferencia de presidentes autonómicos del pasado viernes, el coronavirus se beneficia de la «movilidad».
«El virus se mueve en función directamente proporcional a la movilidad. A más movilidad, más Covid», alegó. Por ello, considera que la «rutina» que supone la vuelta al cole provocará un descenso de los contagios. «No hay nada que contribuya más a recuperar las rutinas en una sociedad que la escuela», insistió.
«Pasaremos a convivir con grupos burbuja cada uno de nosotros, con la familia, con compañeros de trabajo, con amigos… serán grupos estables», pronosticó el presidente extremeño.
Quejas de los centros
Los centros educativos extremeños ya se han quejado al Gobierno regional de cómo se ha llevado la preparación del nuevo curso. Hasta 37 colegios públicos de Badajoz arremetieron contra el Gobierno de la Junta de Extremadura por la falta de personal, de material y de presupuesto para poner poner en marcha las medidas de protección contra el coronavirus. Lo hicieron públicamente a través de un carta remitida a la consejera de Educación de la región, Esther Gutiérrez Morán.
«Manifestamos nuestra enorme preocupación por la falta de medios materiales y profesionales con los que se está planteando el inicio del curso 2020-2021, lo cual podría tener consecuencias inmediatas para el mantenimiento de la educación presencial en Extremadura, así como gravísimas consecuencias para el conjunto de la salud de la comunidad educativa y la sociedad extremeña», denunciaban en esa misiva.
«La realización de desdobles en el alumnado, la organización de horarios para limitar las entradas de especialistas en varias aulas, la salvaguardia ante ciertas actividades en aquellos docentes que tengan determinadas patologías concretas y muchas otras. Muchas de estas indicaciones son novedades respecto a la guía que se facilitó a los centros para la elaboración de los planes de contingencia», aseguraban los docentes.