La Eurocámara activa el suplicatorio contra Puigdemont para acabar con su inmunidad
Carles Puigdemont y Toni Comín tienen inmunidad por ser eurodiputados, pero esto podría cambiar en los próximos meses. La vicepresidenta del Parlamento Europeo, Eza Bozena Kopacz, ha trasladado al pleno del Parlamento Europeo que el Tribunal Supremo español ha pedido que se levante la inmunidad del ex presidente catalán y del ex conseller.
Comienza así un procedimiento que se prolongará meses. El siguiente paso es que el asunto llegue a la comisión de Asuntos Jurídicos, que se reúne este jueves pero que no podrá tratar el suplicatorio contra los dos políticos independentistas. Las próximas reuniones de esta comisión serán los días 27 y 28 de enero.
Lo primero que hará la comisión de Asuntos Jurídicos de la Eurocámara será nombrar al ponente que elaborará el informe que será sometido a votación, tanto en la comisión como después en el pleno. El ponente no podrá ser un eurodiputado español.
El caso se trata a puerta cerrada e incluye la posibilidad de que el afectado comparezca en una audiencia a la que puede acudir acompañado por un abogado que le asesore o puede designar a otro eurodiputado para representarle.
¿Una entrega a España?
La inmunidad puede convertirse paradójicamente en un ‘regalo’ envenenado para Carles Puigdemont. Pendiente de la euroorden, la suspensión del privilegio parlamentario, por votación en la Eurocámara, dejaría sin argumentos al juez belga -que ha de decidir sobre la extradición- para su entrega a España.
En un escrito contundente, la Fiscalía del Tribunal Supremo ya solicitó al juez instructor, Pablo Llarena, mantener las órdenes nacionales e internacionales de detención, las medidas de prisión provisional y la declaración de rebeldía contra Puigdemont y el ex conseller Toni Comín. Instó además al magistrado a solicitar que la inmunidad se suspenda cuanto antes, como ya lo hizo.
La sentencia europea sobre la inmunidad de Oriol Junqueras ha tenido una primera derivada, paradójicamente, en Puigdemont. El presidente catalán, junto a Comín, recibió una acreditación provisional del Parlamento Europeo y ya han ido a su primera sesión.
No obstante, esa inmunidad tendría, a priori, una vigencia fugaz. El procedimiento para que quede en suspenso, aunque farragoso, debe iniciarse a petición del Tribunal Supremo, que ha cursado una petición para que los dirigentes independentistas puedan responder ante la Justicia española de los delitos de los que se les acusa. Ahora está en marcha un proceso burocrático, que culmina en un informe de la Comisión de Asuntos Jurídicos y la consiguiente votación en sesión plenaria. La decisión se toma por mayoría simple.