Pilar Alegría

El chollo de la portavoz del PSOE como ministra: casa de 320 m2 y 12.601 € en limpieza a cargo del Estado

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Luz Sela
  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

La nueva portavoz del PSOE, Pilar Alegría, forma parte de la lista de ministros con una vivienda oficial a su disposición y gastos de mantenimiento a cargo del Estado. Se trata de un inmueble de 320 metros cuadrados útiles, con tres estancias habilitadas, que se utilizan como habitaciones, según la información facilitada a OKDIARIO por su propio departamento. Al menos hasta julio, Alegría disfrutaba de esa vivienda con gastos pagados.

Desde el Ministerio de Educación confirman que «se dispone de la infraestructura necesaria para que la persona titular del mismo pueda desempeñar sus funciones» y que «actualmente, cuenta con una vivienda oficial afectada temporalmente que, durante esta legislatura, ocupa la titular del departamento». Dicho inmueble está situado en la provincia de Madrid aunque el Ministerio aclara que «no es posible informar de su ubicación exacta ni de otras características que podrían permitir su identificación, por razones de seguridad pública».

Además de la vivienda, los gastos de gestión y mantenimiento corren a cuenta de las arcas públicas. Así, según la información -que firma la subdirectora general de la Oficialía Mayor, Carlota Gloria Rubio Harcones- el gasto en electricidad ascendió en 2021 a 3.535,77 euros y el de agua, a 312,94 euros. Además se cuenta con un contrato menor de limpieza, a 12.601,21 euros anuales. Alegría asumió la cartera de Educación en julio del año pasado.

OKDIARIO ha recabado esta información tras cursar una petición, a través del Portal de Transparencia, a todos los ministerios, en la que se solicitaba expresamente: «Si la persona titular del Ministerio dispone de un inmueble dedicado a vivienda particular y si hace uso de él, la ubicación del inmueble y sus dimensiones, el número de habitaciones, si dispone de personal de servicio para las labores domésticas del inmueble, el coste de dicho personal, los gastos de mantenimiento del inmueble en 2021». El Ministerio de Educación respondió el pasado mes de julio, justo antes del nombramiento de Alegría como nueva portavoz de la Ejecutiva socialista.

Este periódico ha ido revelando las viviendas oficiales de los actuales ministros del Gobierno, así como las reticencias a facilitar los datos relativos al mantenimiento, como el consumo eléctrico. Así, por ejemplo, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, aseguró desconocer a cuánto ascienden los gastos de luz de su residencia porque, alegó, «están incorporados a las facturas del inmueble del Ministerio» y «son indiferenciables del conjunto del mismo». La vicepresidenta segunda reside en una vivienda de 443 metros cuadrados en el Ministerio de Trabajo, la más grande de las que ocupan los ministros.

Por su parte, la ministra de Hacienda y actual vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, también despachó las preguntas de este periódico afirmando que desconoce cuánto paga por las facturas de la luz en su vivienda oficial, un inmueble de 143,9 metros cuadrados, con cuatro habitaciones. La número dos del PSOE esgrimió que son gastos «del cargo».

El ascenso de Alegría

En apenas unos meses, Pilar Alegría ha ido ganando influencia en Moncloa y Ferraz hasta el punto de convertirse en la mujer de confianza del presidente del Gobierno y en una de las voces más radicales en la ofensiva contra el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo. «Feijóo es el primo de Rajoy, pero vago en conocimientos», llegó a decir, en una entrevista en El País. Hace unos días,  instó al líder popular a estudiar «un poco más» para equivocarse «un poco menos», por su rechazo a apoyar el decretazo energético del Gobierno. Una actitud que ha sorprendido pues, hasta el momento, Alegría había mostrado un perfil moderado.

Pese a que ahora es mano derecha de Sánchez, su relación no siempre fue tan estrecha, al menos en público. En 2017, Alegría se posicionó a favor de Susana Díaz en las primarias que enfrentaron a la entonces presidenta de la Junta de Andalucía, a Patxi López y al actual secretario general del PSOE. Antes había apoyado a Eduardo Madina, también rival de Sánchez.

En 2019, Sánchez la impulsó para la lista a la Alcaldía de Zaragoza, aunque no logró ser regidora. Poco después la colocó como delegada del Gobierno en Aragón.

La ahora portavoz del PSOE ocupó algunos titulares polémicos, como cuando se supo que lleva a su hijo a un colegio privado internacional de Zaragoza. Ello, pese a que la Ley de Educación que ha desplegado -aunque fue aprobada por su predecesora, Isabel Celaá- supone un ataque frontal a la educación concertada. Ella se ha desmarcado afirmando que estos colegios son «clave para conseguir una educación de calidad». Además, ha renunciado a proteger el español en las aulas catalanas ante la imposición lingüística de la Generalitat separatista.

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