Bárcenas activa el ventilador: «Mi dinero en Suiza lo manejaba la misma sociedad que a la Casa Real»

barcenas-gurtel-play

La segunda jornada de declaración de Luis Bárcenas en el juicio del caso Gürtel se ha desarrollado en la Audiencia Nacional con la continuación de las preguntas de la fiscal Concepción Sabadell. En este martes, el acusado se ha visto acosado por innumerables cuestiones técnicas sobre su dinero en Suiza, los más de 42 millones de euros que llegó a manejar en sendas cuentas abiertas en el Dresdner Bank y el Lombard Odier. Una vez más, el máximo empeño de la fiscal era incriminar a su esposa, también acusada en la causa, Rosalía Iglesias, y el de Bárcenas evitarlo.

Y como ‘momento del día’ ha estado la puesta en marcha del ventilador por parte del acusado, cuando ha citado a la «Casa Real» como una de las «grandes fortunas» que se beneficiaban de la gestión de fondos en Suiza a través de Favona, una sociedad de Lombard Odier, banco en el que él mismo tenía cuentas ocultas al fisco español.

El ex tesorero del PP ha defendido este martes que nunca declaró el dinero del que disponía en cuentas fuera de España porque quería conservarlo a modo de «fondo de pensiones». Cuando la fiscal ha insistido en si no lo declaró «porque creía que no tenía que hacerlo o simplemente porque no quiso», el acusado ha contestado, ufano: «Simplemente, no lo declaré hasta la regularización fiscal de 2012».

Durante su segunda jornada de declaración ante el tribunal de la Audiencia Nacional encargado de juzgar la primera época de actividades de la trama Gürtel (1999-2005), el que fuera gerente de los populares, que se enfrenta a una petición fiscal de 42 años y medio de cárcel, ha comenzado a responder al bloque de preguntas relacionado con sus ingresos en el extranjero.

Además de hablar de esos 42 millones de euros como «un fondo de pensiones personal», Bárcenas ha exculpado expresamente al Partido Popular –como ya hiciera el lunes cumpliendo con su pacto con la dirección del partido que reveló OKDIARIO– de cualquier relación con esos fondos: «El PP no tiene nada que ver, este dinero procede de mis actividades profesionales».

Aunque es cierto que la mayoría de los negocios de los que se ha hablado en esta segunda jornada han sido con Rosendo Naseiro y Ángel Sanchis, ambos dos ex tesoreros del Partido Popular.

Ha explicado a la fiscal Concepción Sabadell que el dinero que depositó en dos cuentas en Suiza a partir de 1988 procedía de «transacciones con no residentes españoles». Los fondos «no estaban declarados, porque el dinero era de operaciones que realizaba fuera y quería tenerlo fuera y no lo declaraba en España», ha sido su explicación ante las reiteradas preguntas del Ministerio Público sobre su falta de tributación.

Según ha concretado, antes de dirigirse a Suiza, abrió en 1986 una cuenta en Puerto Rico donde depositó los ingresos de operaciones realizadas entre Estados Unidos y Alemania. La primera cuenta en el país helvético la abrió en 1988 en Private Bank y un año más tarde –y no en 1994 «como dicen los informes» que obran en el sumario, ha indicado– cuando traspasa los fondos a Dresdner Bank.

Ha apostillado que, desde ese momento y por «circunstancias personales», tiene dos cuentas en Suiza, en el Dresdner y en el Bance Suisse Italienne (BSI).

El dinero en el extranjero, sólo en Suiza

No obstante, ha apuntado, que en el año 2000 decide traspasar los fondos del BSI al Lombard Odier cuando conoce a los responsables de la última entidad financiera. «No he tenido cuentas en otros países que no fuera en Suiza», ha destacado.

También ha afirmado que hizo una declaración tributaria especial en septiembre de 2012 [durante la ‘amnistía fiscal’ decretada por el Gobierno] para regularizar su situación, una vez que la Audiencia Nacional solicita la primera comisión rogatoria a las autoridades helvéticas. «A partir de ahí no oculto nada», ha agregado.

Sabadell le ha inquirido sobre el motivo por el que su mujer Rosalía Iglesias y su hermano Juan Carlos aparecen como autorizados en las cuentas. Bárcenas ha constatado que sólo les facilitó la cartulina de firma para que plasmasen su rúbrica y que no les informó de dónde estaba exactamente estas cuentas.

Según ha dicho, lo hizo con la intención de que pudiesen acceder al dinero en el caso de que él falleciera y ha destacado que su pareja firmaba lo que le decía sin «plantear ningún problema» por confianza aunque el documento estuviese en francés. «Mi mujer firmaba lo que yo le ponía a la firma, ni preguntaba ni yo le daba explicaciones», ha insistido en a menos cinco ocasiones durante la jornada.

Bárcenas –que ha concretado que siempre viajaba a Suiza en avión para aclarar que «nunca he viajado con dinero encima, todo lo que ingresaba en Suiza era dinero que se me entregaba allí»–, ha defendido que nunca provocó perjuicio a la Hacienda Pública porque, tras esta regulación realizó otra retroactiva y fuera de plazo en que incluyó los ingresos de su sociedad de cartera de valores, Tesedul, relativos a 2011 y abonó por ellos 350.000 euros al fisco.

Gestión de fondos de terceros

A preguntas de la fiscal Sabadell, Bárcenas ha aclarado por qué decidió cambiar su cuenta personal a la de una Fundación, llamada Sinequanon. «Cuando recibí tres millones de euros de unos inversores uruguayos, el banco me conminó a que lo hiciese de esa manera, porque no tenía sentido que estuviesen esos fondos a mi nombre».

Asimismo, Bárcenas ha subrayado que entre 1998 y 2005 las cuentas siempre han estado a su nombre y que los bancos le han tenido identificado a él como cliente. Fue en 2005 cuando decidió constituir la fundación Sinequanon para poder gestionar los fondos de terceras personas de inversiones iberoamericanas.

Debido a que estos clientes no se fiaban de que los fondos se encontrasen en la cuenta personal de Bárcenas, el extesorero popular comentó al Lombard Odier la necesidad de crear una sociedad para gestionar estos fondos que «no eran míos». Ha afirmado que fue el banco suizo el que le aconsejó que en vez de una sociedad, constituyese una fundación, debido a que, por entonces, era senador por Cantabria y «tenía calificación de Persona Expuesta Políticamente (PEP)».

Así podría tener capacidad de gestión de los fondos, ha aseverado ante las preguntas de la fiscal, pero no de disponer de ellos. Tras explicar el motivo por el que se traspasaron los fondos de su cuenta personal para la formación de la fundación Sinequanon, Bárcenas ha insistido en que «no hay ocultamiento de nada».

«La misma sociedad que la Familia Real»

Ha sido entonces cuando Bárcenas ha puesto en marcha el ventilador y ha citado a la Casa Real como una de las «grandes fortunas españolas» a las que Lombard Odier, a través de una sociedad llamada Favona, le gestionaba los fondos. «La misma Favona manejaba mi dinero, como a la Casa Real y a otra grandes fortunas españolas», ha dicho textualmente.

Y sobre Favona, ha aclarado que no pretendía esconderse tras ella: «No es una sociedad pantalla, en todo caso es una sociedad visillo porque se me ve perfectamente», ha proseguido. Según ha indicado, empleó para crear la Fundación un despacho subsidiario del banco suizo Lombard Odier, Favona SA, «que también utiliza parte de la Familia Real».

De hecho, ha señalado que su «nivel de transparencia era tan grande que los dos bancos se comunicaban la información». Esto lo ha dicho al asegurar que desconoce los motivos por los que en el Lombard Odier no se le refleja como PEP, pues, según ha afirmado, comunicó al banco helvético en una conversación informal durante un almuerzo que había sido nombrado senador en el año 2004.

El regreso de los fondos a los inversores uruguayos

Bárcenas ha explicado que sus clientes le expresan en 2008 su deseo de retirar los fondos depositados. El motivo es la caída de la Bolsa y no la apertura del procedimiento en su contra ya que «no tenían modo de saberlo en aquel momento.

Ese mismo año, según ha explicado, devolvió el principal depositado de forma íntegra. La rentabilidad de las inversiones le fue entregada a los clientes dos años después, ha dicho.

Una vez más, Bárcenas ha exculpado a su esposa de conocer sus negocios: «Rosalía no tenía ningún poder en la fundación. Mi esposa firmaba donde yo decía que firmase, difícilmente conocía las cuentas de España y mucho menos las de fuera, porque nunca se lo comenté», ha enfatizado.

Bárcenas también ha hecho referencia a los inicios de la investigación en su contra a manos del juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón. Se ha referido a su condición como aforado y a un episodio que le condujo a remitir una carta de queja al entonces presidente del Senado Javier Rojo después de que el portero de su domicilio le comunicara que la policía había intentado entrar en su casa.

Negocios con Mercadona

«¿Estaba usted presente en aquel incidente?», le ha preguntado la fiscal a lo que él ha respondido: «No, precisamente estaba haciendo negocios en Moscú». De aquella etapa como senador que acompañó los inicios del procedimiento sobre la trama Gürtel, Bárcenas ha recordado la intensa preocupación y las presiones a las que se vio sometido en el seno del PP. «Estaba hiperpreocupado», ha admitido en un punto.

No obstante, el ex tesorero ha restado importancia al hecho de que en esos momentos documentos internos del banco hablaran de «disensiones en el PP» después de que el llamara para advertirles de la investigación judicial. Para Bárcenas, al menos así ha insistido en varias ocasiones en estos dos días, las circunstancias de su cartera de valores no tienen nada que ver con el Partido Popular.

También ha negado que concediera a Iván Yañez poderes a consecuencia de la investigación y ha precisado que el 12 de febrero de 2009 –coincidiendo con el estallido del ‘caso Gürtel– le pidió que se desplazase a Suiza en su nombre pero para que se hiciera una idea del estado de su cartera de valores. La coincidencia de fechas es «casualidad y no causalidad», según ha contestado el ex tesorero.

«En 2011, tenía mucho tiempo libre y me apetecía implicarme en esto, me apasiona», ha comentado Bárcenas a las preguntas de la fiscal sobre su relación con Ángel Sanchis y su explotación agraria ‘La Moraleja’ en Argentina. Aun así, ha admitido que no ha aportado a la causa ninguno de los informes. Bárcenas cuenta que ayudó a Sanchis a vender más en Europa. «En una sola operación, les hice multiplicar por cinco sus ventas en el continente, yo les pedí un porcentaje, pero no lo conseguí, y finalmente me dieron unos honorarios en cantidad fija». ¿El cliente? «Mercadona».

Sin embargo, ese contrato se canceló cuando se conocieron las cantidades de las cuentas suizas de Bárcenas: «No querrían contaminarse». Además, la fiscal se ha sorprendido al saber que sólo emitió » un informe de dos páginas sobre el asunto». Y el acusado ha insistido en que en 2011 tenía mucho tiempo libre, como explicación una vez más de la ausencia de soporte documental de sus afirmaciones: «Yo estaba completamente al tanto cada día de la operativa para aumentar las ventas en Europa, porque no tiene por qué ser por escrito exclusivamente, puede ser verbal…»

Lo último en España

Últimas noticias