COMUNIDAD DE MADRID

Ayuso no ha podido reclutar a 773 sanitarios extra por el déficit de profesionales competencia de Sánchez

El Gobierno de la Comunidad de Madrid quería contratar a 1.800 profesionales para su plan invernal

Finalmente sólo han podido cubrir 1.027 de los puestos de trabajo por la falta de sanitarios

Ayuso sanitarios
Isabel Díaz Ayuso y Pedro Sánchez.
Paula Baena

El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso no ha podido contratar a 773 sanitarios extra con los que quería contar para la campaña de invierno de la Comunidad de Madrid por el déficit de profesionales que existe, competencia del Gobierno de Pedro Sánchez y, en concreto, del Ministerio de Sanidad, capitaneado por Mónica García.

La Consejería de Sanidad madrileña estaba dispuesta a contratar en el marco de su plan invernal a un total de 1.800 profesionales para reforzar hospitales y centros de salud en estas fechas, ante al aumento de la demanda asistencial por la incidencia de la gripe estacional, así como otras afecciones respiratorias propias de la época.

Sin embargo, de esos 1.800 puestos de trabajo sólo se han cubierto 1.027 porque «no hay profesionales sanitarios suficientes», tal y como esgrimen desde el departamento autonómico liderado por Fátima Matute.

De hecho, la consejera llevó esta cuestión al Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud de España celebrado el pasado 21 de diciembre. Lo hizo para que la nueva ministra de Sanidad tomara cartas en el asunto, pero, por el momento, el Ejecutivo brilla por su inacción.

Además, Matute también lleva tiempo reclamando al Ministerio de Sanidad la celebración de un consejo monográfico para evaluar el grave problema que existe de falta de profesionales sanitarios.

Mientras tanto, para tratar de paliar la situación, el Ejecutivo de Ayuso aprobó el pasado mes de septiembre una orden en virtud de la cual la región podrá contratar a médicos y pediatras extranjeros a lo largo de los próximos tres años. La orden aprobada por el Gobierno autonómico declaró como especialidades médicas deficitarias en los centros y organizaciones adscritos al Servicio Madrileño de Salud (Sermas) a las especialidades de medicina familiar y comunitaria, y pediatría y sus áreas específicas.

De esta forma, Ayuso ha eximido para su acceso del requisito de nacionalidad con vigencia de tres años a los médicos extranjeros. En cualquier caso, éstos deben contar con la titulación de licenciado o grado en medicina, y con el correspondiente título en la especialidad requerida, expedida u homologada en España.

El documento subraya que «la escasez de facultativos que puedan adquirir la condición de personal estatutario constituye un importante problema del sistema sanitario, que debe afrontarse adoptando todas las medidas que resulten necesarias para dotarlo de los recursos necesarios».

Imposición de la mascarilla

A pesar de no tomar medidas para paliar esa falta de profesionales sanitarios, Mónica García ha decidido imponer las mascarillas en los centros de salud de toda España, una medida a la que todas las comunidades autónomas se opusieron, con la única salvedad de Cataluña, pero que Más Madrid ha decidido implantar de manera obligatoria.

Desde la Consejería madrileña de Sanidad consideran esta medida ineficaz, puesto que –dicen– no tiene sentido que sea obligatorio llevar la mascarilla en hospitales y centros de salud, pero luego en lugares donde se pueden producir aglomeraciones como en el Metro, centros comerciales y restaurantes, se pueda ir sin el tapabocas.

Así, la Comunidad de Madrid apela al sentido común de los ciudadanos, «que son adultos», a la hora de ponerse la mascarilla. «Abogamos por la concienciación en cuanto al uso de mascarillas, cuando tienes síntomas, si eres frágil o vulnerable en cualquier sitio con aglomeraciones», ha explicado la consejera de Sanidad, Fátima Matute.

Además, la responsable de la sanidad madrileña afirmaba este miércoles que el contagio de gripe ya está disminuyendo, y mostró su confianza en que la tendencia continúe a la baja, aunque seguirán atentos a la monitorización.

«No se ha observado un aumento de la gravedad ni de la mortalidad a través de nuestro sistema de vigilancia, esta epidemia de gripe estacional es igual o menor que en otros años», ha asegurado Matute, después de que Mónica García haya establecido esa obligatoriedad de las mascarillas en toda España en hospitales y centros de salud.

Una imposición que pasará a recomendación en las comunidades autónomas que vayan presentando un descenso de la incidencia acumulada durante al menos dos semanas, tal y como ha explicado la ministra de Sanidad.

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