El auto del juez: Ángel Boza, de ‘La Manada’, ya tenía antecedentes por robo y usó medios peligrosos

El auto de prisión para Ángel Boza, miembro de ‘La Manada’ detenido tras robar unas gafas y darse a la fuga, argumenta la cárcel en los antecedentes de robo que ya constaban en el expediente de Boza, según el contenido al que ha tenido acceso en exclusiva OKDIARIO.

El juez tipificó hace unas horas los hechos como un robo con violencia penado con entre 2 y 5 años de cárcel. Tres años, destaca también el auto, por el uso que hizo el detenido de su coche como un medio peligroso para consumar el robo. No se olvida el juez de incluir en su auto el riesgo de fuga que aprecia al estar pendiente el detenido de los recursos sobre los nueve años de cárcel por los que ha sido condenado en primera instancia por los abusos de las fiestas de San Fermín.

Fueron las cámaras de vigilancia las que descubrieron a Ángel Boza en pleno cambiazo de gafas. Se acercó al expositor, pidió ver unas gafas valoradas en 148 euros y en un descuido del vendedor le arrancó la alarma anti-hurto y las sustituyó por las que llevaba puestas. Luego salió como si nada, pagó el ticket del aparcamiento y salió a la calle con su vehículo y su carnet de conducir recién recuperado en el bolsillo.

Sin embargo los vigilantes ya le seguían, siempre según el juez y el atestado policial, y entonces sucedió lo que presuntamente ha llevado al miembro de ‘La Manada’ a la cárcel. “Ángel Boza procedió a salir de la rampa del parking que desemboca en la plaza de la Gavidia, cuando un vigilante se dirigió al detenido a través de la ventanilla del coche y éste dando caso omiso dio un volantazo invadiendo el carril contrario y golpeando con el coche a un vigilante en el costado causándole lesiones…posteriormente otro vigilante se interpuso delante del coche pero Boza continuó con la marcha obligando al vigilante a esquivarlo aunque le golpea con el turismo sin causarle lesiones”.

Fue la Policía local la que consiguió interceptarlo a la altura de la Puerta de la Carne y recuperar las gafas sustraídas que había dejado en el salpicadero del coche. Uno de los vigilantes recibió asistencia hospitalaria por contusión abdominal en el Hospital Quirón Sagrado Corazón donde los médicos le diagnosticaron lesiones leves.

No ha sentado bien al resto de ‘La Manada’

Su abogado, Agustín Martínez, cree que la medida cautelar es excesiva e insiste en que las lesiones son inexistentes. «Al vigilante cuando le atienden en el hospital le recetan un paracetamol, y en el coche ni rastro del supuesto golpe al vigilante», argumenta.

El letrado ha anunciado que en breve recurrirá  este auto de prisión y en concreto los argumentos de reincidencia que incluye el mandato judicial.

El asunto, que jurídicamente no afecta al proceso judicial abierto tras la condena por los hechos de Pamplona, no ha sentado nada bien entre los otros miembros de ‘La Manada’, que han visto como se van al traste sus intenciones de pasar desapercibidos durante los meses de libertad que disfrutan hasta que se revise la condena de abusos.