ELECCIONES EN GALICIA

Álvaro Díaz-Mella será el candidato de Vox a las elecciones gallegas

Vox resta importancia a las encuestas que le dejan fuera: "En Andalucía pasó en 2019 y fuimos decisivos"

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Pelayo Barro

Vox ya tiene a su candidato para las elecciones gallegas del próximo mes de febrero: será Álvaro J. Díaz-Mella López, según ha podido confirmar OKDIARIO en exclusiva. La formación de Santiago Abascal ha escogido a este vigués de 62 años, con formación en derecho y prejubilado de Telefónica. Abascal anunció esta semana su intención de «ser decisivos en Galicia para que cambien las cosas, no con sillones sino con políticas».

La elección se ha hecho esperar, pero finalmente Vox ya tiene a su candidato para las elecciones gallegas. Díaz-Mella es el presidente provincial de la formación en Pontevedra y ha sido el candidato a la alcaldía de Vigo en las pasadas elecciones municipales. También encabezó la lista de Vox al Congreso por Pontevedra en las generales.

Díaz-Mella ha desarrollado su carrera profesional en Telefónica, de donde se prejubiló hace unos años. Durante ese tiempo ha estado dedicado a la gestión de equipos, una circunstancia que ha decantado la balanza hacia este candidato, en vistas a la ambición de Vox por crecer definitivamente en Galicia. Su territorio pendiente.

El candidato de Vox para las elecciones gallegas, Álvaro José Díaz-Mella, de 62 años, es licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid y Máster en Dirección y Gestión de Empresas (MBA) en Know How Bussines College. «Tiene una dilata experiencia profesional en el sector de telefonía móvil tras ocupar, durante 19 años, cargos de gestión, distribución y comerciales en Telefónica», reseña Vox en su biografía oficial. También ha desempeñado puestos de Dirección, Gestión, Marketing y Organización y Control de ventas en empresas de diversos sectores -Seguros, Ingeniería y Transportes-.

Sin presión por las encuestas

Pese a las encuestas que dejan a los de Vox fuera del Parlamento gallego, Santiago Abascal ha señalado esta semana: «Nosotros no hacemos encuestas». Y ha recordado el caso de Andalucía en 2019, donde las encuestas apuntaban a que Vox no iba a tener representación «y se convirtió en determinante para la mayoría» de Juanma Moreno con sus doce escaños.

Ahora, de cara a las gallegas, en Vox asegura: «Nosotros queremos ser decisivos en Galicia, que cambien las cosas, las políticas».

Elección compleja

Vox ha sido el último partido en anunciar su candidato para las elecciones gallegas, tras un proceso de selección que ha sido «arduo y muy exigente», según señalan fuentes de la formación de Santiago Abascal.

En ningún momento, explican las fuentes consultadas por OKDIARIO, estuvo encima de la mesa una retirada de la candidatura para dejar el terreno libre al PP, como habían instado públicamente algunas figuras de la formación que dirige Alberto Núñez Feijóo. Sin embargo, en la dirección de Vox sí se manejó desde un primer momento el hecho de que Galicia es un «territorio eminentemente del PP» en el que una campaña no será fácil, por lo que la elección de un candidato «ambicioso» se ha convertido en la pieza clave del proceso si Vox quiere entrar en el Parlamento gallego.

Entre los nombres que llegaron a sonar se encuentra el de Manuel Fraga Pedroche, nieto del fallecido fundador del PP Manuel Fraga. Una figura con bastante tirón mediático que no cristalizó. Algunas fuentes de la formación apuntan a que nunca fue la primera opción, ya que el propio Fraga había comunicado a la formación ya en 2020 que no tenía ningún tipo de vocación para dar el salto a primera línea política. Seguirá como asesor de Vox en el Parlamento europeo.

En la formación de Abascal se apostaba firmemente por un candidato con un perfil militante, conocido en Galicia y huyendo de la figura del paracaidista político. Alguien que conozca el tejido del partido en Galicia, el territorio en el que hasta ahora ha tenido menor implantación que en otros territorios de España. Y ese ha sido finalmente Díaz-Mella.

Con el PP en contra

La entrada de Vox en la carrera electoral gallega no ha sentado bien en el PP. Por su parte, a preguntas de los medios, la secretaria general del PP gallego, Paula Prado, evitaba la pasada semana valorar el nombre del nieto de Fraga y la posibilidad de que les hiciese más daño electoral que otro candidato, en la línea de la estrategia que siguen los populares gallegos de evitar dar protagonismo a un partido que, reiteran, cuenta con una edil en Avión (Orense) como única representante institucional.

Los ataques desde el PP a Vox se han recrudecido en los últimos días, tras constatar que los de Abascal finalmente se presentarán. «Queda poco más de un mes para las elecciones. Si hay algún partido que todavía no tiene candidato, pues imagínense ustedes lo que va a influir en el voto», aseguró antes de añadir que Vox «no tiene aspirante ni tampoco proyecto» para Galicia.

Cambios en la dirección

Vox se encamina hacia semanas claves para su futuro político a corto y medio plazo. En primer lugar, con la elección del candidato para las elecciones gallegas, uno de los desafíos más complejos que afronta la formación en el calendario. Y en segundo término, por la renovación de sus cuadros directivos que se avecina.

Según ha adelantado Abascal este lunes, solicitó «al Comité Ejecutivo Nacional que adelante la Asamblea para elegir a la dirección de Vox. Será el 27 de enero, surgirá la nueva dirección política de la formación para los próximos 4 años».

«Es imprescindible que todos los afiliados lleguen a un estado de constancia colectiva sobre el momento crítico que vivimos y seamos capaces de conjurarnos ante este momento, con el peor Gobierno de la historia», ha señalado Abascal.

Candidatos alternativos

Al respecto, Abascal ha sido cuestionado sobre posibles candidatos alternativos que puedan disputarle la presidencia de Vox. El actual líder de la formación ha asegurado que él se presentará, pero que desconoce si hay alguna candidatura alternativa cuando le han preguntado por el nombre del portavoz de Vox en el Ayuntamiento de Madrid, Javier Ortega Smith.

«Habrá cambios, como siempre que hay una nueva etapa. Pero los militantes se enterarán antes que ustedes por una cuestión de respeto», ha señalado Abascal. Las posibles candidaturas necesitarán un 10% de avales del total de militantes con derecho a voto, que son alrededor de 50.000 y, por tanto, 5.000 los avales necesarios.

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