Un agente de la ‘Kitchen’: “Se usaron fondos reservados de forma habitual para dietas, comidas o coches”
OKDIARIO ha entrevistado en exclusiva a un agente de la ‘Kitchen’. Él fue uno de los policías que recibió la orden de seguir a Luis Bárcenas para destruir las pruebas del caso Gürtel y que no llegaran a la Justicia. El agente -que ha pedido el máximo anonimato a este diario- afirma que las órdenes las recibían en nombre de “Mariano Rajoy y Soraya Sáenz de Santamaría”. Y que usaron de forma generalizada fondos reservados.
PREGUNTA.- ¿Se utilizó dinero de fondos reservados para hacer determinados pagos?
RESPUESTA.- Sí.
P.- ¿Sabrías cuantificar el importe de los fondos reservados empleados?
R.- No sabría cuantificarlo, pero los policías cobraban dietas para poder comer fuera de casa, dormir, alquilar coches. Se fue un dinero importante de los fondos reservados del Estado, se dio un dinero importante de la Comisaría General de Información que se dedicó a ese tipo de labores.
P.- ¿Y esos pagos se hacían con fondos reservados para que no quedase constancia de las operaciones?
R.- Sí, sí. Si se alquilaba algún vehículo o cualquier cosa, se pagaba en efectivo.
Con esa rotundidad contesta el agente entrevistado por OKDIARIO.
P.- ¿Cómo fueron los seguimientos a la mujer de Bárcenas?
R.- Se hicieron seguimientos a la mujer de Bárcenas, pero, al final, de ahí no se sacó nada en claro. En esa labor no se consiguió, digamos, ningún indicio, ni prueba de que estuviera al final colaborando con su marido.
P.- ¿Pero se entró en el taller de Rosalía Iglesias?
R.- Sí, entraron en el taller. O sea, nosotros no realizamos la vigilancia, pero sí que se entró en el taller.
P.- ¿Qué otros equipos se encargaban de ese tipo de cuestiones? De la entrada del falso cura en el domicilio familiar y de la entrada en el taller de la mujer.
R.- No. No nos dijeron más.
P.- ¿Nunca tuvisteis reuniones conjuntas con todos los equipos?
R.- No. Las reuniones las tendrían desde arriba, por así decirlo, para decirnos después lo que teníamos que hacer nosotros.
P.- ¿Sospechó la familia de que les estuvierais siguiendo?
R.- Yo creo que al final, cuando se realiza un seguimiento durante tanto tiempo, por muy bien que se haga, siempre se ve a alguien. Podían tener sospechas de que tres estábamos siguiendo. Normalmente el mes se dividía en tres periodos y cada diez días estaba un equipo… Y, al final, cuando estás 10 días detrás de una persona, por muy bien que lo hagas, si quieres obtener información, tienes que arriesgarte. Y al final, pues yo creo que lo sospechaban sin tener la certeza de que lo que estábamos viviendo.