Las 77 facturas del socio del cuñado de Ribó por asesorar al Ayuntamiento de Valencia suman 220.000 €
El alcalde de Valencia, Joan Ribó (Compromís), sigue contra las cuerdas por la relación de su ayuntamiento con el despacho de abogados de su cuñado. Varios abogados de esa firma cobraron hasta 77 facturas de servicios de asesoramiento a la Empresa Municipal de Transportes valenciana. Son en total 220.000 euros los que se han pagado con cargo a las arcas públicas, 95.000 de ellos directamente vinculados al bufete del cuñado de Ribó.
El 10 de noviembre de 2015, SMT Asesores presentó a la EMT su primera factura. La relación entre ambas sociedades se había establecido poco antes mediante un contrato firmado por el abogado Salvador Martínez Tarín y la empresa pública, dependiente del Ayuntamiento de Valencia. El importe, 600 euros (más IVA) en concepto de cuota fija a percibir todos los meses por las tareas de «secretario asesor del consejo de administración» del ente público.
De ahí al 21 de octubre de 2019, cuando SMT presenta la última factura (de 9.752 €) de asesoramiento a la EMT, se suceden un total de 77 facturas. Casi siempre de carácter mensual, recogiendo diversas actuaciones realizadas por encargo de la empresa pública. En algunas ocasiones, se presentan más de una factura al mes. Todas ellas, que obran en poder de OKDIARIO, llevan el sello de entrada al registro de la EMT.
En total, SMT Asesores, vinculada directamente con el bufete que preside el cuñado de Joan Ribó tal y como ha ido informando OKDIARIO, facturó a la EMT un total de 220.000 euros. Una relación por la que el alcalde ha tenido que someterse a un pleno de reprobación, en el que ha vuelto a negar cualquier implicación de su familia en este asunto pese que el PP le ha presentado documentos que desmienten su versión: al menos hay 100.000 euros que, mediante contratos de exclusividad, habrían sido cobrados en último término por Abastos Abogados, la firma del cuñado de Ribó.
En los contratos figuran tareas como representar a la entidad en reuniones, redactar contratos de alta dirección o gestionar conflictos con los sindicatos. Por ellas se pasaban minutas desde los 90 euros hasta los 1.200 euros, correspondientes a la redacción de informes legales. A eso hay que sumarle la cuota fija de 600 euros, que se cobraba aunque no hubiese ningún trabajo concreto. Una cuota que en la renovación del contrato de este año pasó de 600 a 3.000 euros.
La relación de esta corporación pública con el cuñado de Ribó quedó al descubierto después de que una banda de estafadores consiguiese que la EMT derivase cuatro millones de euros en trasferencias a un banco de Hong Kong. Lo consiguieron engañando a una funcionaria y haciéndose pasar por altos cargos de la empresa, que en ese momento se encontraban de vacaciones.
Ahora, el Ayuntamiento de Ribó trata de recuperar parte de ese dinero. La investigación policial sigue en marcha, pero la política ha quedado aplazada después de que el PSOE se alinease con Compromís para vetar una comisión de investigación sobre lo ocurrido.