Revilla modifica a la carta la normativa de tragaperras tras abrir un local el hijo de su tesorero

El presidente del Gobierno de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha decidido que revisará los decretos que regulan las máquinas recreativas y de azar y las apuestas en Cantabria. Está decidido a abrir la mano para ampliar el tipo de tragaperras y nuevos productos en los establecimientos. Este hecho tiene lugar pocos meses después de que el hijo del tesorero de su partido, Alfredo Trueba, abriera un local de máquinas tragaperras.

La sociedad Ludere Bets SL fue fundada por el hijo del tesorero del partido de Revilla, Alfredo Trueba Álvarez, el 25 de enero de 2016, fecha en la que fue nombrado administrador solidario, según consta en el Registro Mercantil. El objeto social de la empresa son «las actividades de juegos de azar y apuestas». En la actualidad, el domicilio social de la mercantil radica en la calle José Posada Herrera de Torrelavega.

El suculento negocio del hijo del tesorero del Partido Regionalista de Cantabria (PRC) está situado en un local de 220 metros cuadrados localizado en la zona de Cuatro Caminos, uno de las zonas más emblemáticas de la ciudad y con más trasiego de vecinos. Este local está siendo regentado mediante Luckia Sport Café, una franquicia que ofrece salón de juegos, córner de apuestas y zona de restauración. Para adquirir una franquicia de estas características es necesaria una inversión de 250.000 euros y un cánon de entrada de 20.000 euros.

Antes de que el hijo del tesorero del partido de Revilla adquiriese el local en el que estableció su flamante negocio, éste estaba ocupado por una panadería, por lo que Ludere Bets SL tuvo que realizar un proyecto de obra que presentó al Ayuntamiento de Torrelavega, ya que el hijo del tesorero del partido de Revilla quiso eliminar los tabiques y redistribuir los espacios de la sala. Se da la circunstancia de que el teniente de Alcalde en Torrelavega es Javier López Estrada, hijo de Francisco Javier López Marcano, ex consejero de Cultura y hombre de confianza de Miguel Ángel Revilla.

El consejero de Presidencia y Justicia, Rafael de la Sierra, ha expresado la «voluntad» del Gobierno de colaborar con el sector empresarial y propiciar una regulación que ayude «a tener más actividad y a generar riqueza y empleo».

En este sentido, ha recordado el reglamento aprobado en 2015 por este Gobierno, al comienzo de la legislatura, que regula las apuestas deportivas, una nueva normativa que «logró cubrir un vacío legal» y que «abrió las puertas a la ampliación de negocios y a la creación de empleo en el sector del juego».

Además, el Ejecutivo de Miguel Ángel Revilla amplía el tipo de máquinas tragaperras y se excusa asegurando que los cambios son demandados por el sector empresarial del juego, que pide abrir la posibilidad de incorporar nuevos productos en sus establecimientos.

Los cántabros gastaron un total de 305 millones en juegos de azar en 2016, lo que supone un 1,3% más que en el año anterior, según datos del Instituto Cántabro de Estadística (ICANE). De este modo, Cantabria vuelve a rebasar los 300 millones jugados, cantidad que no superaba desde 2012, aunque muy alejada de los 411 millones de 2006, el récord en los últimos once años.

El incremento del gasto de los cántabros en 2016 estuvo impulsado por la subida del 2,47% realizado en juegos de gestión privada -casinos, bingos y máquinas-, que pasó de 162 millones en 2015 a 166 el siguiente ejercicio.

Ocultó facturas al Tribunal de Cuentas

Tal como y como ha publicado OKDIARIO, el partido de Miguel Ángel Revilla ocultó al Tribunal de Cuentas varias facturas por un importe de 49.261,94 euros correspondientes a gastos de las campañas electorales de 2015, abonados a la empresa de su propio tesorero, Alfredo Trueba, conocido en el partido como Fito.

Revilla, aseguró en el programa El Hormiguero, que el tesorero de su partido no hace nada sin consultarle antes. «¿No voy a saber lo que hace el tesorero? Ese no hace nada sin consultarme a mí. Nada», dijo el regionalista en una entrevista.