La burocracia de la ‘ecologista’ Ribera tumba proyectos renovables tan potentes como 15 nucleares
Retraso del Ministerio de Transición Ecológica en la tramitación de la declaración de impacto ambiental
El Gobierno impuso a la CNMC aprobar cientos de proyectos renovables sin examinar su solvencia
La ‘ecologista’ Ribera tarda 3 años en responder a Green Capital sobre la autorización de parques eólicos
Esquizofrenia total en el Ministerio de Transición Ecológica. Teresa Ribera ha tumbado proyectos renovables por una potencia conjunta de 15 GW (equivalentes a unas 15 centrales nucleares) por no concederles a tiempo la declaración de impacto ambiental. Al mismo tiempo, como adelantó OKDIARIO, impuso a la CNMC aprobar 300 licencias de renovables sin examinar su solvencia. Es decir, fuerza la aprobación de unas y tumba otras.
Fuentes conocedoras de la situación explican que, dentro de los infinitos trámites burocráticos que deben superar las instalaciones de energía renovable, el que está suponiendo un verdadero obstáculo es la citada declaración de impacto ambiental que tiene que conceder el mismo Ministerio que otorga las licencias, el de Ribera.
Este departamento suele pedir información adicional a las empresas adjudicatarias de estas licencias sobre el impacto ambiental, lo que retrasa el trámite, según estas fuentes. Y después, el Ministerio de Teresa Ribera se eterniza a la hora responder, con lo que vence el plazo que tienen de validez las adjudicaciones de renovables. Eso obliga a las compañías a volver a presentarse a otra subasta y empezar el proceso de cero.
Esta situación confirma el monumental atasco que tiene el Gobierno en el campo de las energías renovables, que han denunciado empresas como Green Energy: en su caso, Ribera tardó casi tres años en analizar y responder a su petición de levantar un parque eólico de 156 MW en la provincia de Soria y, además, la respuesta fue denegar el permiso y tumbar el proyecto.
Teresa Ribera la ecologista
Todo esto supone un sinsentido cuando Ribera es precisamente la adalid del ecologismo dentro del Ejecutivo de Pedro Sánchez. Cabe recordar que acudió en bici a una cumbre europea en Valladolid para dar esa imagen verde, pero iba seguida por varios coches de su séquito. Su última actuación viral ha sido un vídeo en el que trata de demostrar que hace más calor al sol que a la sombra.
La tardanza en otorgar estas declaraciones de impacto ambiental va en dirección opuesta a las prisas para que la CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia) aprobara de golpe 300 licencias en abril -es otro de los numerosos trámites burocráticos que deben superar-porque se les pasaba el plazo. Un plazo que había establecido el propio Gobierno en un decreto. Este aluvión de solicitudes se debió al enorme retraso del Ministerio en la tramitación burocrática de estas licencias, que databan de 2018, 2019 y primera mitad de 2020.
Aparte de la injerencia en un organismo teóricamente independiente, aprobar todas esas licencias sin examinar la solvencia de las empresas adjudicatarias dispara el riesgo de más casos de quiebras de pequeñas empresas del sector, como el reciente de EiDF.