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Renault adelantará 600 euros al mes a cada trabajador en ERTE para evitar que sufran el caos del SEPE

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Andrea Aguado
  • Andrea Aguado
  • Redactora de economía y coordinadora de OKMOTOR. Amante de las cuatro ruedas y la industria. Antes en informativos de Radio Televisión Castilla y León.

El caos que vive el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), desde que la crisis del coronavirus comenzó a dar sus primeros coletazos el pasado mes de marzo, ha obligado a Renault España a blindar la seguridad financiera de más de 11.600 trabajadores de las plantas de Palencia, Valladolid y Sevilla, tras la entrada en vigor de un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) por causas productivas. El fabricante automovilístico galo pagará 600 euros al mes a cada empleado para evitar que sufran un retraso en los pagos.

Según han confirmado fuentes conocedoras de la situación en conversaciones con OKDIARIO: «Los trabajadores afectados por el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), que lo necesiten, podrán solicitar un anticipo de la prestación, por el importe máximo de 600 euros al mes, a devolver a los tres meses desde el mes de su abono ante el miedo a que su produzca un retraso en los pagos, como ya sucedió con los expedientes por causa de fuerza mayor del pasado mes de marzo de 2020».

«Este anticipo, a devolver, se realiza de este modo por que en España no esta permitido realizar un pago delegado, esto es, que la empresa anticipe el desempleo de los trabajadores y luego el SEPE se lo abone», recalcan.

Renault España ha tomado está decisión, ya que aún siguen existiendo incidencias con los pagos del pasado expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) por fuerza mayor de marzo de 2020. Un problema al que rápidamente ha respondido el fabricante automovilístico galo: «Si algún trabajador tiene pendientes cobros del anterior expediente, por parte del SEPE, deberá comunicarlo a la empresa para comenzar las gestiones para subsanar las incidencias», explicaban a este diario.

No obstante, no es la primera vez que el fabricante automovilístico tiene que velar por la seguridad financiera de sus trabajadores. Con la entrada en vigor del anterior expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) de marzo de 2020, Renault España puso a disposición de sus empleados un pago mensual de 700 euros -a devolver en tres meses- ante los retrasos del organismo que dirige Yolanda Díaz.

Una política que han agradecido los empleados de las factorías de Valladolid, Palencia y Sevilla: «Tanto los empleados como a la representación social valoramos la gran responsabilidad con la que están afrontando esta difícil situación para las plantas de Renault España ante un problema de penuria de abastecimiento de piezas -semiconductores- que afecta al sector de la automoción a nivel mundial».

Un problema que comenzó en la factoría del fabricante automovilístico en Palencia con la parada en el ensamblaje de los modelos Kadjar y Mégane por la falta de abastecimiento hasta perder la producción de 900 unidades. Un número que se ha disparado en los últimos meses por el aumento de las paradas que han obligado al fabricante automovilístico francés a presentar un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE).

Nuevas inversiones

El Grupo Renault ha adjudicado cinco nuevos coches híbridos a sus factorías de Villamuriel de Cerrato (Palencia) y Valladolid y dos nuevas cajas de cambio a la planta de Sevilla, según ha anunciado este martes el CEO del Grupo francés, Luca de Meo, durante la presentación del Plan Industrial 2021-2024, que incluye, además, la realización de 1.000 contratos indefinidos y que generará 12.000 millones de euros de valor para la economía española.

Según el Plan Industrial 2021-2024, la fábrica de Palencia será la encargada de producir tres nuevos vehículos de los segmentos C y ‘D-SUV’, que llegarán de forma escalonada en 2022, 2023 y 2024, mientras que la factoría de Carrocerías y Montaje de Valladolid producirá otros dos modelos, de los segmentos ‘B-SUV’ y ‘B+SUV’, que comenzarán a fabricarse en 2024.

Asimismo, se ha asignado una nueva familia de motores híbridos a la fábrica vallisoletana que llegarán en 2023 y dos nuevas cajas de velocidades a la factoría de Sevilla para 2022 y 2024, donde también se desarrollará un proyecto de economía circular.

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