Un pueblo de Murcia consigue echar a 100 okupas gracias a un método totalmente legal y sin orden del juez
Sobre todo por la okupación directa de viviendas vacías, los vecinos tienen una enorme sensación de indefensión. Sin embargo, en un pequeño pueblo de Murcia han dado con la tecla para luchar contra los okupas.
Y es que en Alguazas, con apenas 10.000 habitantes, han logrado expulsar a casi un centenar de okupas sin necesidad de una orden judicial. Y lo mejor de todo es que el proceso es rápido.
El pueblo de Murcia que ha declarado con éxito la guerra a los okupas
En plena Vega Media del Segura, el pueblo de Alguazas ha demostrado que desde los ayuntamientos y con la colaboración vecinal se pueden tomar medidas efectivas contra los okupas.
Allí, los vecinos, propietarios y autoridades locales han desarrollado un protocolo coordinado que permite recuperar viviendas okupadas sin enfrentamientos ni trámites interminables. El secreto está en la rapidez y la organización.
Cuando los okupas abandonan momentáneamente el inmueble, por ejemplo para comprar o realizar cualquier otra actividad, se pone en marcha el plan: primero se cortan los suministros de agua y luz; después, se retira la puerta principal y, acto seguido, se levanta un muro de ladrillo que sella completamente la entrada.
En cuestión de horas, los okupas se quedan fuera… sin posibilidad de volver a entrar. Gracias a este sistema, el municipio ya ha logrado recuperar 94 viviendas y dos edificios completos.
No sólo es un método eficaz contra la okupación, sino también para hacer que las calles sean más seguras. En muchos casos las propiedades estaban vinculadas a actividades delictivas como el tráfico de drogas.
La mejor estrategia legal de los municipios contra los okupas
Aunque pueda parecer una medida extrema, lo cierto es que la actuación de Alguazas se ajusta a la legalidad siempre que no exista una protección judicial sobre la okupación.
El procedimiento se ejecuta con la colaboración directa del propietario, lo que convierte la intervención en una recuperación legítima del inmueble. La clave está en actuar en el momento justo: cuando los okupas no están dentro.
De este modo, se evita cualquier enfrentamiento y se respeta el marco legal. Además, la rápida intervención impide que los okupas reclamen derechos sobre la vivienda.
Además, el éxito del método ha hecho que más de uno se lo piense dos veces. La firmeza del municipio ha corrido de boca en boca, y el simple hecho de saber que en Alguazas las casas okupadas se tapan con ladrillos ha servido de disuasión.
Otros pueblos españoles que se han plantado contra la okupación
El caso murciano no es el único de España donde los vecinos se movilizan contra la okupación. Otro ejemplo muy positivo lo encontramos en Madrid, concretamente en Fresno de Torote.
Situado al este de la Comunidad de Madrid y con una población aproximada de 2.500 habitantes, Fresno de Torote lleva varios años implementando medidas para reforzar la seguridad.
La última medida adoptada por el Ayuntamiento se puso en marcha el pasado mes de agosto, con la incorporación de patrullas privadas que recorren las calles del municipio.
Estas patrullas pertenecen a una empresa de seguridad y se encargan de realizar tareas de supervisión y aviso, sin portar armas ni intervenir de manera directa.
Su función principal es disuasoria, y según fuentes municipales, los resultados están siendo positivos. Inicialmente, su actividad estaba prevista sólo para los meses de verano, cuando suele aumentar el movimiento de personas y, con ello, el riesgo de pequeños delitos.