Los inversores catalanes aumentan más de un 100% la compra de metales como activo refugio por el miedo al ‘procés’
Los inversores están sacando su dinero en masa de Cataluña y lo están metiendo en activos refugio, principalmente en metales. Tanto es así, que fuentes del sector numismático y de refinerías han confirmado a OKDIARIO que la facturación de metales desde la región catalana ha aumentado en más de un 100%.
Rubén Pulido, CEO de Pulifil, reconoce que «mucho inversor catalán ha disparado sus adquisiciones en metales». En un principio se pensó que todo estaba motivado por el descenso en el precio de los metales, pero tras conversaciones con algunos de estos clientes potenciales, ellos mismos confiesan que se trata de una gran inseguridad, que les lleva a derivar sus inversiones de esta forma. La huída de los inversores se debe, de este modo, a «la gran preocupación ante la deriva del proceso independentista».
El metal que más compran estos inversores catalanes según las fuentes consultadas es el oro, aunque «también se realiza bastante inversión mixta, plata-oro, e incluso se esta vendiendo platino». La inmensa mayoría de estos inversores que huyen de la región son empresarios ligados al turismo y algunos que tenían fondos en empresas catalanas. «Están derivando sus inversiones hacia los metales (plata, oro, platino…), bien en emisiones numismáticas destinadas a la inversión, o bien en lingotes provenientes de refinerías con las que tenemos acuerdos», explica Pulido.
El platino es un metal que también se acuña. De hecho, se está vendiendo bastante onza de platino en formato moneda. «Al fin y al cabo el valor en peso es similar y al almacenarlo en monedas sumas también un atractivo numismático», reconocen en Pulifil, desde donde explican que los inversores catalanes «suelen diversificar».
«Se ha retirado mucho dinero invertido… Los clientes europeos que viven en Cataluña son los que más han derribado sus inversiones, sobre todo los empresarios alemanes», señalan en el sector. «Obviamente no podemos dar nombres, pero muchos inversores que estaban en el sector hotelero han empezado a vender y a meter ‘la pasta’ en otra parte. Los metales llevan dos años buenísimos y todo esto ha sido un detonante para que las inversiones en ellos se disparen, de aquí a tres o cuatro meses, se espera una importante subida».