El Gobierno aplazó la aprobación de la renta mínima para sumar a la CEOE en el texto final

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, encargó hace unos días a la vicepresidenta tercera, Nadia Calviño, recuperar el consenso con la CEOE. Desde entonces la ministra de Asuntos Económicos, uno de los pocos puentes del gabinete con los empresarios, trata de llegar a un acuerdo con la patronal para que la versión final del texto de la renta mínima incluya también sus reivindicaciones.

La relación entre Moncloa y la CEOE se rompió por completo la semana pasada, tras el pacto del PSOE, Podemos y EH Bildu para derogar la reforma laboral sin haberlo comentado con la mesa del diálogo social, que se reúne los jueves. En ese momento Antonio Garamendi anunció que se levantaba de la mesa y que ponía fin a la relación con el Ejecutivo.

Semanas antes, por eso, a cuenta de la renta mínima y por culpa también del vicepresidente Pablo Iglesias, CEOE desmintió el supuesto acuerdo alcanzado entre el Gobierno y los agentes sociales para una renta mínima puente que nunca se llegó a poner en marcha. Con esa prestación fantasma el líder de Podemos quería dar respuesta a los más vulnerables durante la crisis del coronavirus.

Ahora, con el fin de que la renta mínima genere el mayor consenso, dado que el Gobierno espera que llegue para quedarse, Sánchez quiere que los empresarios aporten su visión y posición en una medida que tendrá una gran incidencia entre el sector empresarial.

Todo ello con Pablo Iglesias al margen de la relación con los agentes sociales. Mientras, el titular de Inclusión y Seguridad Social, José Luis Escrivá, dirige los contactos con los sindicatos Calviño intenta recuperar la buena relación que, hasta hace unos días, mantenía el Ejecutivo con la patronal.

Tras lo vivido esta semana, a raíz del acuerdo con Bildu, el Gabinete de Pedro Sánchez ordenó a sus ministros desplegar un gran discurso mediático que alabe a la patronal CEOE. Así lo han hecho desde el pasado jueves, tras conocerse el acuerdo, varios ministros del Ejecutivo e incluso el propio presidente.

Los portavoces gubernamentales, tanto a través de ruedas de prensa como de entrevistas televisivas, destacan el «patriotismo» del presidente de los empresarios Antonio Garamendi. Con estos mensajes pretenden contrarrestar los ataques y el menosprecio de Iglesias y Podemos. Moncloa considera «claves» las relaciones con los empresarios y por eso quieren proteger los puentes tendidos con la patronal.

Las diferencias ideológicas entre Pablo Iglesias y Nadia Calviño, y las tensiones provocadas a cuenta de las políticas públicas del Gobierno y como financiarlas, han provocado una fuerte desazón tanto dentro del Gabinete como entre los agentes sociales.

Las constantes salidas de tono del vicepresidente segundo sacan de quicio a la vicepresidenta tercera y ministra de Economía e incluso a sindicatos y patronal. Moncloa da por perdida esa partida y por eso busca interlocutores válidos, Escrivá con los sindicatos y Calviño con la patronal, para no ponerse más gente en contra.

Aunque el ministerio de Trabajo repite a diario que el 98% de los ERTE, que se han presentado durante la crisis del coronavirus, ya se han abonado, la realidad es bien distinta. La falta de liquidez que el impago de los salarios, muchos sin cobrar desde el mes de marzo, está dejando a muchas familias españolas en una situación extremadamente vulnerable.

Estas familias, no obstante, por los ingresos previos a la crisis del Covid-19, no son destinatarios del ingreso mínimo vital. Moncloa trabaja a contrarreloj para pagar esos ERTE antes del viernes con el fin de que la aprobación en Consejo de Ministros de esta nueva prestación no provoque una revuelta contra el Ejecutivo.

El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, quiere más micro con esta nueva ayuda. Por eso, el pasado lunes, le exigió a Pedro Sánchez, en una reunión en Moncloa, más protagonismo con esta prestación que dependerá del ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, dirigido por el independiente José Luís Escrivá.

Es por ese motivo que este viernes, según indican fuentes de Moncloa a OKDIARIO, tras el Consejo de Ministros Iglesias y Escrivá comparecerán conjuntamente, con la portavoz María Jesús Montero, para dar los detalles del ingreso mínimo vital.