Los ganaderos recuerdan la importancia de las granjas intensivas y piden que no se las criminalice
Marcos (PP): «Garzón, la gota que colma el vaso del campo víctima de la ideología del gobierno de Sánchez»
Moncloa acusa a Garzón de atizar la polémica de la carne para revalorizarse: «Así se habla de él»
El ministro de Agricultura estalla contra Garzón: «Si habla de alimentación lo normal es que me llame»
Adiós a la vitrocerámica: el invento del Lidl para tener la comida lista en segundos por menos de 25 euros
Furor en Mercadona por el nuevo producto que está arrasando: es antiinflamatorio y mejora el tránsito intestinal
Las organizaciones agrarias Asaja, COAG y UPA han pedido que no se «criminalice» a la ganadería intensiva, especialmente la vinculada a los negocios familiares y cooperativas, ya que son necesarias en el modelo de producción actual, con unas demandas de alimentación mundial crecientes.
Es uno de los mensajes que han lanzado las organizaciones este viernes tras reunirse en Madrid con el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, y con el comisario europeo de Agricultura, Janusz Wojciechowski, tras la polémica generada sobre las declaraciones del ministro de Consumo, Alberto Garzón, sobre la calidad de la carne española y el maltrato animal en algunas explotaciones.
El presidente de Asaja, Pedro Barato, ha señalado, en declaraciones a los periodistas, la necesidad de convivencia entre la ganadería extensiva e intensiva; de hecho ha puesto como ejemplo el ganado que nace en extensivo y luego pasa a engordarse en cebaderos intensivos.
«Es ese el modelo» actual y lo ve necesario para alimentar también a una población mundial creciente.
Garzón pone en peligro la viabilidad
Respecto a Garzón, ha añadido que con sus palabras «pone en riesgo la viabilidad» de la ganadería en España y ha pedido que «se deje de intoxicar» ya sobre esta polémica y «dejen en paz a los ganaderos».
El secretario general de COAG, Miguel Padilla, ha reclamado «no criminalizar» a la ganadería intensiva por el hecho de serlo, porque es necesaria en zonas de España con falta de «base territorial».
«A veces no todo puede ser extensivo», ha añadido Padilla para quien se ha generado «confusión» entre ambos modelos de producción.
Ha recordado que en España no hay legislación que defina lo que es una «macrogranja», pero sí hay normativa vigente sobre ordenación en el sector avícola y en el porcino.
Además, ha valorado que el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) esté trabajando una normativa para ordenar también el sector vacuno (lechero y no lechero).
Por su parte, el secretario general de UPA, Lorenzo Ramos, ha agradecido a Planas y al propio comisario que hayan defendido la calidad de la carne española.
Esa calidad «excelente» de la carne también la defendió ante el ministro de Consumo, Alberto Garzón, con el que mantuvo un encuentro.
Además, ha subrayado que «no hay maltrato animal, si no una inmensa mayoría de granjas en extensivo, semi-intensivo, ecológico o intensivo que son tradicionales y que hacen las cosas muy bien».