La enemistad entre Guindos y FG hace topar al banquero con un hueso duro en el BCE
El banco central no se siente cómodo con la actual posición de González en el organigrama de BBVA, donde aún es presidente de Honor del banco y de la fundación.
El Banco Central Europeo no ve con buenos ojos la continuidad de Francisco González en el organigrama de BBVA, aunque sea desde puestos honoríficos y no ejecutivos, pues las previsibles consecuencias penales que pueda sufrir el banquero gallego podrían arrastrar a un banco azul que, como todo el sector, no está sobrado de buena reputación ante la sociedad española.
Esta semana ha podido verse cómo desde Fráncfort se lanzan mensajes para que Carlos Torres coja el toro por los cuernos y prescinda de FG cuanto antes, unos mensajes adelantados por OKDIARIO y que el propio Luis de Guindos confirmó en la rueda de prensa del BCE tras la decisión sobre los tipos. Detrás de estos mensajes subyace una realidad: la mala relación personal o enemistad manifiesta entre Luis de Guindos y Francisco González, que según fuentes financieras es un ‘driver’ de importancia en la situación.
Una mala relación que habría tenido su último episodio con respecto al plan de sucesión de González, que en el BCE hubiera gustado que se hubiera hecho de otra manera al tener otros candidatos diferentes a Torres. Pero donde González no hizo ninguna concesión y consiguió hacerlo exactamente como él quería, según recuerdan fuentes bancarias consultadas por este periódico.
Decisión ejemplar con FG
El BCE es ahora mismo uno de los principales focos de presión sobre Torres para exigirle que tome una decisión ejemplar con FG, precisamente en la semana en la que se están conociendo más detalles sobre los pinchazos telefónicos presuntamente ordenados por González y que, tal y como se está conociendo, no fueron solamente destinados a políticos del Gobierno, empresarios implicados en el intento de toma de control a BBVA y periodistas, sino también a directivos de banca de la competencia, a los que FG también habría encargado espiar de manera ilegal a pesar de que la presidenta de Bankinter, Dolores Dancausa, lo calificó como «un banquero modélico» este mismo jueves.
Desde fuentes próximas a Fráncfort se lamentaba que el nombramiento de Carlos Torres como presidente de BBVA, una de las últimas decisiones que tomó Francisco González junto a su consejo de administración en septiembre, no había sido consultado de manera elegante con el supervisor del sistema bancario europeo. Desde BBVA se recuerda, no obstante, que Torres aprobó su examen ‘fit and proper’ -unas pruebas que realiza el banco central para saber la idoneidad de un candidato a gestionar un banco sistémico de importancia- el mismo 22 de diciembre, el día posterior a su nombramiento oficial y su inicio como directivo que se produjo el 21 de diciembre con el abandono definitivo de FG.
Inicia su carrera bancaria gracias a Rato
FG comienza su carrera bancaria tras una notable carrera de 30 años como ‘broker’ en bolsa y lo hace a través de un nombramiento político: el entonces ministro de Economía Rodrigo Rato lo elige con 51 años para ser el presidente del banco público Argentaria en 1996. Posteriormente con ese apoyo político del Partido Popular de Aznar, González consigue hacerse con el poder en el fusionado BBVA apartando de la dirección a las grandes familias vascas que habían controlado el banco hasta entonces.
Cuando Guindos constituye Sareb en un momento de gran presión para la economía española, González es el único banquero que rechaza darle apoyo
Sin embargo, no es precisamente De Guindos uno de los grandes amigos de Rato, como han mostrado de sobra los distintos episodios del caso Bankia en el que tuvo que decidir como ministro de Economía, sobre el futuro del banco hoy público y el de su presidente. En estos años en que Guindos ha coincidido con FG cada uno desde su atalaya de poder, han sido muchos los enfrentamientos entre el presidente del banco y el ex ministro. Por ejemplo, recordemos como BBVA fue el único banco que rechazó aportar dinero para Sareb, el ‘banco malo’ constituido por el Ejecutivo para que la banca pudiera aparcar sus activos tóxicos sin que lastratan su balance. Un desaire a Guindos que sólo hizo BBVA.
O como Guindos ‘repesca’ a José Ignacio Goirigolzarri, ex consejero delegado del banco azul que salió de la entidad en época de Francisco González, para gestionar Bankia a pesar de que este nombramiento no era del gusto de González, quien no ha cultivado una fama de hombre amable precisamente durante sus muchos años ejerciendo puestos de alta responsabilidad.
Esta gran cantidad de enemigos que el gallego ha mantenido durante los años en que ha manejado la gestión del segundo banco español puede ser uno de sus principales problemas ahora que llega su retiro y que han saltado a la luz las prácticas poco decorosas que presuntamente impulsó junto al comisario José Manuel Villarejo durante años.