EiDF aprueba una ampliación de capital en busca de un socio industrial y salda el préstamo con Andbank

EiDF ha aprobado una ampliación de capital de hasta 20 millones de euros con la que amortizará de forma anticipada la totalidad de la deuda bancaria que mantenía con Andbank. Según ha confirmado la compañía, los fondos se obtendrán mediante la entrada inminente de un nuevo socio industrial, operación que permitirá, por primera vez desde la crisis abierta por la anterior gestión, dejar la estructura financiera prácticamente limpia: «Esta operación representa un paso clave en nuestra hoja de ruta para consolidar la estabilidad financiera de EiDF”, explican desde el grupo.

Lejos de incorporar un socio meramente financiero, la firma gallega confirma que el nuevo accionista será de carácter industrial, lo que busca reforzar no sólo su capital, sino también su estructura operativa. La compañía prevé comunicar los términos definitivos de la operación en los próximos días, pero fuentes cercanas al consejo de administración señalan que se trata del primer paso hacia una operación corporativa de mayor calado, que relanzará a EiDF a medio plazo y consolidará el cambio de rumbo liderado por el nuevo equipo gestor.

EiDF cierra una etapa

Con esta operación, EiDF deja atrás definitivamente la mochila de deuda heredada de la etapa de Fernando Romero. La compañía pasará de los más de 160 millones de euros de deuda financiera que acumulaba en 2022 a un escenario radicalmente distinto: tan solo 12 millones vinculados a crecimiento, a través de European Sustainable Investment, y otros 4 millones más. El resto será financiación vinculada a proyectos concretos.

Desde que Fernando Romero abandonó la compañía, el nuevo equipo ha tardado un año en reordenar las cuentas y la estrategia, y también asegura haber «saneado los pasivos». “En doce meses», dicen fuentes de EiDF a OKDIARIO, «se ha hecho lo que en cinco años no se hizo: limpiar la casa”.

La amortización anticipada del préstamo con Andbank demuestra, además, que el grupo ha recuperado la credibilidad financiera perdida, y que cuenta con el respaldo de inversores sólidos, entre ellos Laurion Group, cuyo apoyo ha sido clave en esta fase de reestructuración.

Golpe a Prosol: baja al 28%

La operación también tendrá implicaciones relevantes en el reparto accionarial. Prosol, el vehículo vinculado al antiguo presidente, quedará por debajo del 30% de participación tras esta ampliación, en concreto en el 28%, y todo apunta a que su peso seguirá reduciéndose en los próximos movimientos.

El nuevo EiDF ha dejado claro que no quiere fantasmas del pasado ni estructuras opacas en su accionariado. La entrada de un socio industrial y la reestructuración financiera sientan las bases de una nueva etapa de crecimiento que, según el equipo directivo, culminará con una compañía mucho más sólida, transparente y preparada para afrontar los retos del sector energético.

Con once delegaciones en toda España y más de quince años de trayectoria, EiDF se mantiene como la referencia nacional en instalaciones de autoconsumo industrial. Su transformación en tiempo récord consolida el giro estratégico emprendido desde la salida de Romero y anticipa nuevos movimientos que podrían tener carácter corporativo. “Esto solo es el principio”, avisan fuentes internas.