Los economistas temen que los Presupuestos de Sánchez sean «un infierno fiscal para pymes y autónomos»
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado que este martes el Consejo de Ministros aprobará el anteproyecto de los nuevos Presupuestos Generales del Estado (PGE), tras haber prorrogado hasta dos años los de 2018. Los economistas consultados por OKDIARIO han remarcado que estas nuevas Cuentas Públicas «van a ser un completo infierno fiscal para las pequeñas y medianas empresas (pymes), los autónomos y especialmente para los consumidores».
Pese a que los socialistas han tratado de acelerar la negociación todo los posible, todavía existen dudas respecto a algunos de los escollos que enfrentaban a ambos partidos como la regulación del precio del alquiler.
Este mismo lunes, mientras Sánchez afirmó que los Presupuestos se aprobarían este martes en el Consejo de Ministros, fuentes de Podemos aseguraban que todavía no existía un acuerdo cerrado que permitiera su aprobación. Pese a este desencuentro de última hora, ambas formaciones sí coinciden en algunos de los principales aspectos de los nuevos Presupuestos, como la subida de impuestos a las rentas altas o las tasas sobre las transacciones financieras.
Santiago Carbó, catedrático de la Universidad de Granada remarca a este diario que «este martes el Gobierno va tratar de aprobar unos presupuestos que tratan de seguir subiendo los impuestos a las rentas más altas, lo cual es la única solución que tienen cuando no se lucha bien contra el fraude. Pero es que entre rentas altas hay una gran diferencia, por ello me parece que tendrían que buscar otras vías de suficiencia más oportunas».
Por su parte, Marc Ribes, cofundador de Blackbird, cree que «para poder combatir el déficit con el que se enfrentará España (de más de 150.000 millones de euros) hay que compensar las cuentas y para estos hay dos opciones. Una es la de incentivar la riqueza bajando los impuestos y ayudando a las empresas a recuperar el tejido productivo y otra es asfixiando la economía y subiendo los impuestos. Esto tendría un efecto en el corto plazo, pero al final estás estrangulando a la gallina de los huevos de oro, que es precisamente el tejido productivo que hay que cuidar».
Los datos incluidos por el Gobierno en su Plan Presupuestario -que preve una subida de impuestos de casi 7.000 millones- han alimentado las críticas de los economistas por su falta de realismo. Lorenzo Amor, presidente de la organización de autónomos ATA, ha señalado en redes sociales que «pensar que en 2021 habrá menos gasto en paro que en 2020 es muy voluntarista pero poco realista…Basta hablar con los autónomos empleadores y preguntarles». Daniel Lacalle, economista que fue en las listas del PP en las anteriores elecciones, también ha calificado de papel mojado los planes económicos del Gobierno al no ser creíbles las cuentas.
Tasas Tobin y Google
El Gobierno prevé un impacto del conjunto de medidas fiscales que se implementarán y de la nueva Ley de lucha contra el fraude de 6.847 millones en 2021 y de 2.323 millones en 2022, gracias a nuevos impuestos ‘verdes’, a los envases de plástico, un IVA del 21% a bebidas azucaradas, las tasas ‘Google’ y ‘Tobin’ y cambios en imposición directa e indirecta, lo que permitirá incrementar los ingresos en 33.447 millones el próximo año, hasta el récord de casi 494.490 millones de euros.
Sin embargo, Ribes destaca a OKDIARIO que «oculto bajo la tasa Tobin y los impuestos ‘verdes’, al final lo único que va a poder hacer el estado es recortar el gasto público. En este sentido pasará del 53% al 48% del PIB, un recorte sustancial y que además supondrá un incremento notable de los impuestos indirectos, como el IVA que graba a todas las rentas y una asfixia fiscal a las compañías, donde el nuevo gobierno claramente intenta recaudar haciendo más inspecciones más controles, etc».
Empleados públicos
Lo que sí está despejado es el Gobierno aprobará una subida salarial del 0,9% para los empleados públicos para el año 2021, en línea con la previsión de inflación el próximo ejercicio y con la revalorización prevista para las pensiones públicas. También se había suscitado ciertos escollos en lo relativo a la subida del IRPF, ya que Podemos reclamaba un alza de este gravamen a partir de los 200.000 euros para las rentas de capital, frente a las reticencias de PSOE que opta por no incluirlo o que afecte a rentas de más de 300.000 euros.
Sobre aumentar el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM), que se utiliza para calcular buena parte de las ayudas sociales, Montero ya confirmó que los Presupuestos incluirán una subida del mismo, tras tres años congelado, aunque falta por conocer el porcentaje concreto que se articulará.