Bruselas presenta medidas para incrementar la recaudación por IVA del comercio electrónico
La Comisión Europea ha presentado este martes un paquete de medidas que tienen el objetivo de incrementar en 5.000 millones de euros la recaudación por parte de los Estados miembros a través del impuesto del IVA en operaciones de comercio electrónico a partir de 2021, según ha informado en un comunicado.
Bruselas quiere que estas nuevas normas entre en vigor en 2021, por lo que ha pedido a las capitales que lleguen a un acuerdo al respecto a lo largo de 2019 para que las empresas puedan tener una transición ordenada hacia el nuevo sistema.
Según los cálculos del Ejecutivo comunitario, estas medidas pueden facilitar la recuperación de 5.000 millones de euros que las capitales pierden al año en los ingresos del IVA, una cifra que aumentará hasta los 7.000 millones de euros en 2020.
El comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Pierre Moscovici, ha destacado que el nuevo modelo de IVA para el comercio electrónico facilitará a las empresas la venta de bienes online al tiempo que conseguirá que las sociedades incumplidoras no puedan cometer fraude. «Para que esto pase es crucial que los mercados en línea hagan su parte», ha pedido.
En particular, una vez aprobadas, se pondrá en marcha un sistema de ‘ventanilla única’ online a través del cual las empresas que vendan bienes online puedan cumplir con sus obligaciones tributarias en materia de IVA a través de un portal de uso «sencillo» en su propio idioma.
Sin este portal, señala el Ejecutivo comunitario, sería necesario que el registro del pago del IVA en cada Estado miembro en el que se quiera vender un producto, una situación que supone «una de las grandes barreras» al comercio transfronterizo para pequeñas y medianas empresas.
La Comisión Europea ha subrayado que este sistema de ‘ventanilla única’ ya está disponible para el comercio electrónico de servicios en la UE y «funciona bien».
Así, los grandes mercados online serán los responsables de garantizar que se recauda el IVA de la venta de bienes por parte de compañías extracomunitarias a ciudadanos europeos que tienen lugar en sus plataformas.
En concreto, Bruselas cree que las nuevas normas asegurarán que los bienes comerciados desde almacenes de la UE estén gravados con el correcto tipo de IVA incluso cuando están siendo vendidos por empresas que no son europeas.