Barclays espera una reacción negativa del mercado si gobierna PSOE con Podemos y nacionalistas
Los analistas de Barclays destacan que, la coalición PSOE, Podemos y nacionalistas tras las elecciones del 28 A, sería el peor escenario posible para el mercado. Además, señalan a la crisis en Cataluña como un riesgo importante para los inversores.
Barclays destaca que, una coalición entre el PSOE, Podemos y los partidos nacionalistas tras las elecciones del 28 de abril, sería el peor escenario posible para el mercado. Por otro lado, los analistas del banco de inversión británico señalan que las reacciones de este serían favorables en el caso de una coalición de la derecha, formada por PP, Ciudadanos y VOX o incluso, en el caso más señalado por las últimas encuestas con el PSOE pactando con Ciudadanos.
Con el panorama político más fragmentado todavía que en las pasadas elecciones de 2016 tras la entrada en escena de VOX, y el aumento del número de partidos nacionalistas regionales y pequeños partidos, el mercado aguarda expectante los resultados de la próxima jornada electoral. A toda esta incertidumbre política, se suma la continua crisis en Cataluña, que se mantiene como un núcleo de inestabilidad de cara a posibles inversores extranjeros. Esta situación se ha acentuado en los últimos meses con el proceso judicial abierto contra varios líderes independentistas catalanes.
Desde Barclays señalan que en el caso de que no se alcance una mayoría clara, la celebración de unas segundas elecciones impulsaría la necesidad de llevar a cabo un debate político sobre una mayor flexibilización fiscal. Desde el banco de inversión puntualizan que existe un amplio número de votantes indecisos y que la posibilidad de que algún partido alcance una mayoría clara es improbable. Sin embargo, también inciden en que un gobierno minoritario no es descartable, aunque nada deseable.
Además, los analistas de Barclays también han destacado que después del crecimiento de los últimos años, la expansión de España se ralentizará en 2020 hasta el 2,6%. La demanda interna sigue siendo el motor principal del país, junto con la inversión y el consumo privado. España ha sido uno de los mayores beneficiados de la política monetaria acomodaticia establecida por el Banco Central Europeo, y tras el anuncio del fin de esta tendencia los analistas esperan que España se desacelere gradualmente hasta igualarse con sus vecinos de la eurozona.
Entre los principales riesgos que contempla Barclays en el corto plazo para España destacan, las dinámicas de población y el aumento en el número de las pensiones, el alto nivel de desempleo y la regulación del mercado laboral y la crisis de Cataluña y las confrontaciones con los nacionalismos.