La banca española reduce su peso en la deuda pública al nivel del inicio de la pandemia
La banca española ha reducido su peso en el conjunto de tenedores de la deuda pública por quinto mes consecutivo y a cierre de diciembre se sitúa ya al nivel de marzo de 2020, inicio de la pandemia y de la avalancha de subastas de deuda por parte del Gobierno de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias para hacer frente al incremento de gastos por los ERTE y el paro.
Según los datos del Tesoro, organismo dependiente de la Vicepresidencia de Asuntos Económicos, a final de año la banca española tenía 165.247 millones de deuda nacional, lo que supone un 15,22% del total. A cierre de marzo de 2020 atesoraba un 15,23%, 155.193 millones.
Las entidades bancarias salieron a apoyar al Gobierno en sus emisiones de deuda al inicio de la pandemia y de febrero a marzo elevaron su exposición a la deuda española en casi 20.000 millones de euros, hasta los citados 155.193 millones. En los meses siguientes ha seguido en esa misma línea hasta alcanzar el récord en agosto, cuando acumularon 176.728 millones y el 16,2% del conjunto de la deuda nacional.
Ahora la banca española ha cambiado la tendencia y ha ido reduciendo su exposición a los bonos y las letras nacionales y ha reducido en 11.000 millones de euros el valor de la deuda española en sus balances. Y en porcentaje sobre el total es ya ligeramente inferior a la de marzo de 2020, el 15,2%.
Según los datos del Tesoro, a final de año la banca española tenía 165.247 millones de deuda nacional, lo que supone un 15,22% del total. A cierre de marzo de 2020 atesoraba un 15,23%, 155.193 millones
La banca nacional está siguiendo el camino de los inversores extranjeros, que han vendido 22.000 millones de euros desde las cifras de marzo pasado. Actualmente atesoran poco más de 479.000 millones de euros, y ha reducido su peso a poco más del 44%, cifra desconocida desde 2017. El dato refleja que los inversores extranjeros no confían en la economía española, sobre todo a largo plazo, y buscan inversiones en otros países o en otros productos.
Banco Central Europeo (BCE)
Mientras la banca nacional y los inversores extranjeros reducen posiciones en la deuda española, el Banco Central Europeo (BCE) sigue aumentando sus compras de bonos nacionales y lanzando un salvavidas al Gobierno de Sánchez e Iglesias. Este mismo jueves, el organismo que preside la francesa Christine Lagarde ha anunciado que el BCE ampliará su programa de compra de deuda pública en el segundo trimestre del año.
Hasta diciembre -último mes publicado-, el BCE ya superaba los 300.000 millones de euros en deuda española. En concreto, atesoraba 302.525 millones, lo que supone casi un 28% del total de la deuda española en circulación.
Desde febrero y hasta diciembre, el BCE ha aumentado su exposición a los productos españoles en 90.000 millones, mientras que la deuda en circulación se ha incrementado en 91.000 millones
Desde el inicio de la pandemia, el BCE ha comprado prácticamente todo el incremento de la deuda española. Desde febrero ha aumentado su exposición a los productos españoles en 90.000 millones, mientras que la deuda en circulación se ha incrementado en 91.000 millones. Sánchez, que restó méritos a Mariano Rajoy en la resolución de la crisis anterior con el argumento de que fue la ayuda del BCE lo que le permitió dar la vuelta al ciclo económico, le debe ahora a este organismo el dinero que ha servido para pagar los ERTE, el paro, o hacer frente a los aplazamientos en el pago de impuestos.
La consecuencia inmediata de la avalancha de compras del BCE es que, además, los tipos de interés se reducen. Los inversores pagan por comprar deuda española y de otros países. El tipo medio en febrero es del 1,8%, la cifra más baja de los últimos años. Actualmente estaba subiendo y, precisamente por esto y con el objetivo de frenar ese incremento, el BCE ha decidido ampliar las compras semanales de deuda.