Alarma en las pensiones: Sánchez triplica la deuda del sistema y roza los 100.000 millones

La deuda de la Seguridad Social roza ya los 100.000 millones de euros a cierre de febrero, según los datos publicados por el Banco de España. Desde que llegó a la Moncloa Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, en junio de hace cuatro años, el organismo que dirige ahora José Luis Escrivá ha multiplicado casi por tres la deuda: en el segundo trimestre de 2018 acumulaba 35.000 millones y a cierre de febrero ha marcado un nuevo récord en 99.186 millones.

El incremento de la deuda de la Seguridad Social es espectacular desde que el PSOE llegó al poder. A finales de 2017, último año completo del PP de Mariano Rajoy en el Gobierno, la deuda ascendía a 27.393 millones de euros, cifra que se elevó a 35.000 millones en el primer semestre de 2018. En ese momento, Sánchez alcanzó el poder tras una moción de censura -apoyada por el PNV- y decidió echar por tierra las medidas de contención de gasto aprobadas por Rajoy en 2012.

El PP limitó las subidas de las pensiones al 0,25% -para hacer frente a la crisis de 2012 y al elevado déficit que heredó de José Luis Rodríguez Zapatero-, medida que fue aplaudida por organismos internacionales como el FMI. Se daba fin a la tradicional política de elevar las pensiones con la inflación. Pero el PSOE decidió romper con esa política y subir de nuevo las pensiones por encima de ese 0,25% y, desde este año, ligarlas de nuevo a la subida del IPC.

El resultado de esas políticas es que el gasto en pensiones se ha disparado a más de 10.000 millones de euros al mes ya este año. Y la situación se antoja que será peor para el próximo año debido a la elevada inflación que está sufriendo especialmente España por los acontecimientos internacionales.

Hasta marzo se ha situado en el 9,8% y la media del año se situará por encima del 6%, según las previsiones de los principales organismos nacionales e internacionales, que ya han revisado sus cifras sobre la economía nacional. Esto significa que el coste para el año próximo se incrementaría en más de 10.000 millones si finalmente el Gobierno mantiene su política, superando los 160.000 millones de euros. Es el 12% del PIB.

En algunos círculos se habla ya de que el Ejecutivo podría limitar la subida de las pensiones con la inflación a las más bajas, aprobando algún mecanismo para que las más altas se revaloricen menos. Sin embargo, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, señaló hace unos días que se subirán con el IPC, aunque la inflación sea de «dos dígitos» a final de año.

Mientras, los ingresos del sistema están creciendo a un buen ritmo, según Escrivá, a niveles del 8%, pero serán insuficientes para afrontar las subidas prometidas y el envejecimiento de la población. Y todo, a las puertas de que los llamados baby boomers se jubilen y se incorporen al sistema.

¿Soluciones?

Escrivá está buscando soluciones, sobre todo después de que la ‘hucha de las pensiones’ se haya prácticamente vaciado durante la etapa de la anterior crisis gestionada por el PP. El ministro quiere establecer algún mecanismo para que los baby boomers cobren menos, por un lado, y por otro traspasar a los Presupuestos Generales parte de la deuda de la Seguridad Social, que saldría de las cuentas del sistema de las pensiones.

Antonio Garamendi, presidente de la patronal, ha pedido este viernes al Gobierno que establezca algún mecanismo similar al factor de sostenibilidad que introdujo el PP para que la deuda de las pensiones no incida en el déficit.