Tebas saca sus tentáculos en VOX para intentar derribar a Irene Lozano
Javier Tebas no descansa ni en cuarentena. El presidente de la Liga lleva una semana bastante movida tras ser acusado por Luis Rubiales de antipatriota por no compartir los test de coronavirus que facilitó a los equipos de Primera División y posteriormente por su empeño en terminar la competición sí o sí esta temporada a costa de la salud de los jugadores.
El presidente de la patronal de clubes de fútbol no está ni mucho menos satisfecho con la labor de la nueva Secretaria de Estado para el Deporte, Irene Lozano, con quien ya ha vivido algunos encontronazos. Tebas apoya sin miramientos la candidatura de Casillas a la presidencia de la Federación Española de Fútbol y considera que la dirigente no estaba ayudando como sus antecesores a su causa.
Tebas ha peleado con uñas y dientes que no se produjese el adelanto electoral que solicitó Rubiales hasta el punto de personarse con sus abogados en el Consejo Superior de Deportes para intimidar a Lozano. Ahora el presidente de la Liga parece haber movido sus tentáculos políticos para intentar incomodar a la Secretaria de Estado.
VOX, del que es votante reconocido el dirigente futbolero, solicitó el pasado 17 de marzo la comparecencia de Lozano en la Comisión de Cultura y Deporte para responder al despido del jurista del CSD Ramón Barba. Según ha podido saber OKDIARIO, esta persona era la encargada de favorecer deliberadamente diversas decisiones del Consejo barriendo siempre a favor de Tebas.
Barba, según cuentan compañeros del Consejo Superior de Deportes, no habría obrado muy diligentemente con Lozano. Algunos le acusan de haber ocultado que Tebas y Aganzo tenían expirado su cargo en la Comisión Directiva del CSD y que aún así votaron para elegir los nuevos miembros del TAD. También fue público y notorio que Barba realizó diversos informes que siempre favorecieron los intereses de Javier Tebas.
Es por ello que ahora no extraña nada la pregunta del diputado de VOX Rafael Fernández-Lomana sobre la salida de Barba, pese a que todos coinciden en que había motivos y la máxima dirigente había perdido la confianza en el jurista. La pregunta es una gota más en el vaso con el que Tebas quiere ir agotando a sus rivales en el deporte español, al que llevado a una judicialización permanente desde que su amigo y socio Miguel Cardenal dejó la jefatura del CSD en 2016.