La Justicia da la razón a la RFEF frente a Mediapro

Tebas se queda sin ‘su’ VAR

Tebas
Tebas y Roures, principales culpables de los horarios de las jornadas de Liga. (EFE)
Francisco Rabadán
  • Francisco Rabadán
  • Redactor jefe de deportes. He tenido la oportunidad de cubrir dos Juegos Olímpicos, varios Mundiales de distintas disciplinas y algún que otro All-Star de la NBA con los Gasol. De Córdoba y sin acento.

El VAR de Mediapro ha durado una temporada en el fútbol español. La próxima temporada, la reputada empresa Hawk-Eye se hará cargo de la gestión de la tecnología del fútbol en España como ya hace en otras competiciones tan potentes como la Champions, Premier League, la Bundesliga o el pasado Mundial de Rusia.

De poco ha servido la lucha clandestina librada en los juzgados por Mediapro y su socio Javier Tebas. Después de que la Federación decidiese no renovar un contrato firmado por el antecesor a Rubiales –el interino presidente Juan Luis Larrea–, el VAR salió a concurso público y Hawk-Eye fue el ganador del mismo por delante de Mediapro.

Tras perder en concurso, la compañía propiedad de Jaume Roures decidió recurrir a la Justicia ordinaria con el objetivo de paralizarlo todo. No en vano, solicitaron la cautelar para que nada cambiase de cara a la próxima temporada, pero el juez ha decidido dar la razón a la Federación, quien adjudicó el control del VAR a Hawk-Eye para las próximas cuatro temporadas.

«Mediapro impugnará el resultado del concurso por la prestación del Servicio de Vídeo Asistencia al Arbitraje convocador por la Real Federación Española de Futbol. Mediapro considera que las bases del concurso beneficiaban especialmente a uno de los dos ofertantes, de manera que era irrelevante la oferta económica y la calidad de los aspectos técnicos. La oferta de Mediapro era, por otra parte, la más ventajosa de las dos presentadas significando un ahorro casi de 1 millón de euros», dijo en su momento el organismo de Roures, que ahora pagará las costas del juicio. 

Tebas, que quería fervientemente que siguiese el VAR con Mediapro al ser su socio audiovisual preferente, se queda de esta manera sin contar con el aparato que había defendido a capa y espada. Seguramente el aterrizaje de Hawk-Eye no estará exento de polémica por una campaña mediática interesada que tendrá lugar en los próximos meses. Lo que ha quedado claro la RFEF ha ganado la guerra del VAR.

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