«Cuidado con Levy, que muerde»
El Real Madrid busca sustituto para Zinedine Zidane y ha fijado su mirada en Mauricio Pochettino, el gran favorito a ocupar el banquillo del Bernabéu la próxima temporada. Pero no será nada sencillo sacarle del Tottenham. En el club blanco ya saben como se las gasta Daniel Levy a la hora de negociar la salida de una pieza importante de su proyecto, ya sea jugador o el propio entrenador, como pudieron comprobar en 2012 y 2013 para hacerse con Luka Modric y Gareth Bale.
Pochettino ha mandado un aviso al Real Madrid durante una entrevista en Cuatro: «Cuidado, Daniel Levy muerde…». El presidente de los Spurs es un hueso duro de roer a la hora de hablar de fichajes, ya sea para llevárselos a Londres o para permitir que recalen en equipos rivales. Berbatov, Campbell. Keane y Boateng fueron algunos de los que vieron peligrar sus deseos de marcharse debido a la dureza del mandatario británico en las negociaciones.
Levy no entiende de amigos en estos asuntos. El Tottenham ha renovado a su técnico para los próximos cinco años –hasta 2023– en el que no existiría cláusula liberatoria como sí lo había en el anterior contrato, antes del que el conjunto que preside Florentino Pérez le pusiera en el número uno de su lista de objetivos. El máximo mandatario del club inglés lleva 17 años al frente de los Spurs y desde el inicio ya comenzó a crear su fama de duro negociador.
Una de las claves pasa por ahogar a los equipos interesados hasta el último día de mercado, como sucedió con Bale. Al final acaba cediendo, pero no sin antes sacarles hasta el último céntimo que tengan. Del Madrid ingresó 131 millones de euros en dos años –30 por Modric y 101 por Bale–. Levy cogió los mandos del Tottenham en 2001, después de que el anterior presidente, Alan Sugar, declarase al club en bancarrota.
Desde entonces lo ha reflotado a base de dureza en las negociaciones y buenos fichajes hasta convertirlo en uno de los grandes de la Premier League de la mano del técnico argentino. Pero en este caso, el Madrid no tiene tiempo para apurar hasta el final del mercado de fichajes. Si quieren a Pochettino tendrán que chocar una y otra vez contra el muro Spur, impuesto por su presidente.