Operación Melón: así convencieron a Casillas para presentarse a las elecciones de la Federación
El deporte, al igual que la política, hace muchas veces extraños compañeros de cama. ¿Quién le iba a decir a David Aganzo que iba a terminar siendo el mejor amigo de alguien que se inventó una organización –Futbolistas ON– para terminar con el sindicato que él preside –Asociación de Futbolista Profesionales–? El fútbol se ha convertido en una industria cada vez más cruel y los que un día fueron amigos íntimos hoy son enemigos irreconciliables y viceversa.
Aganzo terminó por entenderse con Tebas. El presidente de LaLiga dejaría en paz su sindicato y éste le ayudaría en lo que fuera necesario para desbancar a Rubiales. El actual presidente de la Federación sintió como el amigo al que había aupado al puesto de presidente de la AFE –Rubiales lo fue de 2010 a 2018– había consumado su traición, pero esto no había hecho más que empezar.
En medio de toda la guerra del fútbol, Tebas está como loco por presentar a alguien para que se enfrente a Rubiales en las elecciones a la Federación. El presidente de la patronal de clubes se inventa un papel de embajador de la Liga para Iker Casillas convirtiéndole en Icon de la competición a cambio de una suma de dinero no desvelada.
Eso ocurrió a finales de marzo de 2019 y a partir de ese momento, Tebas activó lo que se conoce como la Operación Melón –mote cariñoso que algunos futbolistas dedican a Iker–. Aganzo, amigo desde hace tres décadas de Casillas, se encargaría de convencer al portero para que se presentase a presidente de la Federación. Bajo el mantra de que «esto está chupao» o «lo tienes hecho», el todavía jugador del Oporto poco a poco fue cediendo terreno y accediendo a la idea de Tebas y Aganzo para presentarse.
Las últimas semanas han sido especialmente convulsas para saber si la candidatura finalmente sale a flote o no. Empezó con las dudas del propio Iker sobre su idoneidad para hacerse cargo de la Federación. «No sabes donde te estás metiendo. Allí hay que ir todos los días a currar y dar la cara», le dijo un amigo que trabajó para la Federación durante mucho tiempo y que comparte currículum con Casillas.
Lo mismo le pasó al verse con Villa, Puyol, Cesc e Iniesta. Todos le advirtieron al Melón que no era el cuento de hadas que le habían vendido Tebas y Aganzo. De hecho, Xavi Hernández, íntimo del portero, le advirtió de que su candidatura era un embrollo y que apoyaría a Rubiales llegado el caso. Casillas, como es lógico, dudó y los esbirros mediáticos de la Liga accedieron a dar nombres de otros candidatos que podían presentarse como Mariano Rajoy y Albert Rivera.
La calculadora de Casillas
Pero al portero le volvieron a poner el caramelo de nuevo en la boca. Le reunieron secretamente con la nueva secretaria de Estado para el Deporte y los impulsores de su candidatura deslizaron que lo tenía hecho sólo con sólo presentarse. «Si hasta te ha recibido la nueva jefa del deporte español», le comentaron. Para terminar de convencerle sacaron los números de la Asamblea, le explicaron que iba a tener un mínimo de 57 apoyos –tal y como ha venido diciendo la televisión oficial de Tebas y Roures, Gol T– y que contaba con el apoyo de las dos organizaciones más potentes del fútbol español fuera de la Federación. ¡Y hasta le organizaron varias encuestas en diversas páginas webs deportivas para que viese que ganaba! Iker quizá no reparó en que las elecciones a la Federación no cuenta el voto popular.
El caso es que todos estos argumentos calaron en un Casillas que ya sí volvió a interesarse por el asunto viéndose empoderado y permitió hasta que se filtrase su candidatura a través de la cadena Ser. El portero ha seguido haciendo gestiones esta semana y hasta tendrá su primer acto electoral oficioso en el Corazon Classic Match contra el Oporto el próximo 29 de marzo en el Bernabéu, pese a que en el Madrid dejan claro su apoyo incondicional a Rubiales. Iker, pese a que sigue sin hacerlo público, va a por todas. La Operación Melón ha terminado siendo un éxito para Tebas y Aganzo, pero un futuro fracaso para Casillas. No será porque no se lo advirtieron sus amigos.