Nadal despeja las dudas y acaba con Auger-Aliassime

El Mutua Madrid Open por fin pudo disfrutar de su gran ídolo en el tercer día de competición del cuadro masculino. Rafael Nadal hizo su debut en la Caja Mágica con sobriedad, acumulando las deseadas sensaciones positivas y despejando las dudas sobre su estado de forma. El tenista manacorense no pasó apenas apuros frente al jovencísimo y prometedor canadiense Felix Auger-Aliassime, con el que acabó en dos sets (6-3, 6-3) y poco más de hora y media de juego.

La puesta en escena no era la mejor para las posibilidades de Rafa. Después de unos días con condiciones meteorológicas idílicas, Nadal debía lidiar de nuevo con el viento, el mismo que le condenó ante Fognini y le desquició por momentos en el Conde de Godó. Sin embargo, Rafa contaba a su favor con haber tropezado dos veces en esta piedra, mientras el imberbe Auger-Aliassime tendría que sufrir las inclemencias del tiempo y al rey de la tierra en una misma batalla.

Los errores no forzados se sucedieron en los primeros instantes de partido, de puro tanteo y con el vendaval imponiéndose a ráfagas a la rivalidad entre los líderes de dos generaciones. Auger se mostraba infranqueable con su servicio, aunque el nivel de Nadal, que mantenía el tanteo con la solidez al saque por bandera, debía subir muchos enteros según avanzase el choque.

Tres juegos para cada jugador campaban en el marcador cuando Nadal decidió poner una marcha más y dotar al partido de un nivel superior. Un claro ataque para ver cómo respondería un Aliassime que en primera instancia no se inmutó, pero llegada la hora de la verdad acabó cediendo su servicio en la primera oportunidad de break concedida a Rafa. Frente a su público y necesitado de llenar su confianza, Nadal no iba a perdonar y cerraba el primer set con su servicio.

Más relajado y dispuesto a seguir adquiriendo ritmo, Nadal no permitió un impasse en el choque en el descanso entre mangas, y regresó a su lugar en la pista dispuesto a contentar a los aficionados que llenaban la grada del Mutua Madrid Open y, principalmente, satisfacer sus propias necesidades a nivel de tenis. El primer juego, con un servicio de Auger-Aliassime que le había costado horrores descifrar en la primera manga, pasaba a su dominio a las primeras de cambio.

Felix necesitaba golpear por encima de sus posibilidades de forma constante para aguantar el pulso de Nadal, mucho más rápido de piernas y adaptado a las condiciones de la pista a la perfección. La altura de las pelotas de Rafa le dotaban de un margen para no cometer errores, en los que sí caía Aliassime por pura lógica. El ídolo de la afición no estaba dando opción a su rival.

Plácido segundo set

La precipitación de Auger dejó paso a un juego mucho más consistente por parte del jovencísimo canadiense, cuyos detalles hacen pensar en él como una referencia a medio plazo en el tenis mundial. Felix sumó sendos juegos al servicio, aunque sin poder dañar lo más mínimo a un Nadal muy cómodo con la ventaja de set y break arriba. El desenlace del estreno de Rafa en el Mutua Madrid Open parecía acercarse.

Un nuevo break podía resultar mortal para las posibilidades de Auger-Aliassime de mantenerse en el partido y Rafa, postulado a favor de finiquitar el choque lo antes posible, volvió a acelerar para dejar en la cuneta a su rival de forma sencilla y práctica. Con muestras satisfactorias de revés y de derecha, el saque de Nadal no confirmó el pleno, cediendo su servicio por primera vez para retrasar un desenlace final que no iba a tardar en aparecer en el siguiente juego, a la quinta pelota de partido, poniendo sello a un notable regreso a las pistas del Mutua Madrid Open.