Muere Victoriano Sánchez Arminio, ex presidente del CTA y pieza clave en el ‘caso Negreira’

Victoriano Sánchez Arminio ha muerto este domingo 21 de mayo a los 80 años. El ex presidente del Comité Técnico de Árbitros ha fallecido víctima de un cáncer de pulmón. El ex jefe de los árbitros fue imputado en relación a un presunto desvío de fondos en el marco del caso Soulé y en los últimos meses fue noticia después de que saltara el caso Negreira, en la que fue una pieza clave durante los pagos del Barcelona durante casi 20 años a su número 2, José María Enríquez Negreira.

Sánchez Arminio fue presidente del CTA desde 1993 a 2018, año de la llegada a la presidencia de la Federación de Luis Rubiales. Tras la llegada del actual presidente, el puesto quedó en manos de Carlos Velasco Carballo, quien más tarde delegó en Luis Medina Cantalejo. Además, Sánchez Arminio arbitró en Primera División desde 1976 hasta su retirada en 1989, cuando puso punto y final a su etapa como colegiado en la máxima competición. Dirigió un total de 149 encuentros en la máxima categoría de nuestro fútbol. Antes había sido miembro del Comité de Designación.

El primer partido que pitó en la Liga española fue entre el Málaga y el Salamanca en 1976. Su papel como colegiado en nuestra Liga durante 13 años le sirvió para convertirse en árbitro FIFA en 1981. A nivel internacional, debutó en el Mundial de España de 1982, ejerciendo de juez de línea del colegiado Lamo Castillo. Además, en 1986 fue elegido por la Federación para ser el representante de España en el Mundial de 1986 en México.

El propio Velasco Carballo quiso dar su último adiós a su antecesor en la presidencia de los árbitros. «Una persona que nos ha ayudado mucho a llegar donde estamos, descanse en paz, un abrazo y un beso a toda la familia. Fue un padre para todos nosotros y supo llevar nuestra organización durante 25 años. Todos le respetábamos y le queríamos. Es una pena que no haya podido disfrutar más de sus nietos», comunicó el madrileño.

Líos judiciales

Pero, en los últimos años fue más conocido por los asuntos extradeportivos. Sánchez Arminio fue imputado junto a su secretario general en el Comité Técnico de Árbitros en la investigación que la Audiencia Nacional emprendió contra Ángel María Villar, antiguo presidente de la Real Federación Española de Fútbol.

Esta investigación pasó a denominarse como el caso Soulé, y se centraba en el presunto desvío de fondos durante la etapa de Villar. No obstante, esta trama es independiente del caso Negreira, del cual se están investigando los siete millones de euros que el Barcelona pagó a José María Enríquez Negreira, quien fuera vicepresidente del CTA y mano derecha de Sánchez Arminio con el fin de proporcionar informes arbitrales.

La Audiencia Nacional ordenó el pasado mes de marzo la imputación de Victoriano Sánchez Arminio. Los magistrados estimaron parcialmente el recurso interpuesto por la Liga para la imputación del ex presidente del Comité Técnico de Árbitros junto con el que fuera secretario general de la Federación, Raúl Massó, así como que vuelva a llamar en calidad de investigado a Ángel María Villar. La causa investiga el desvío de fondos de 7,9 millones de euros.

El pasado 4 de mayo, el juez de la Audiencia Nacional dio por concluida la investigación del caso al entender que no quedan nuevas diligencias por practicar, y rechazó archivar el caso para el que fuera jefe de los árbitros Victoriano Sánchez Arminio.  El caso Soule está relacionado presunto desvío de casi ocho millones de euros procedentes de la recaudación de las quinielas.  Según los denunciantes y Anticorrupción, existen indicios de que los sospechosos destinaron ese dinero a «otro tipo de gastos, diferentes a los previstos en los convenios», y que en dichas maniobras «intervinieron» el expresidente y el ex secretario técnico del comité de árbitros.

Pieza clave en el Caso Negreira

Victoriano Sánchez Arminio volvió a estar en el foco de la polémica después de que saltara el caso Negreira, que involucra a José María Enriquez Negreira, ex número 2 del cántabro, que cobró más de siete millones de euros del Barcelona durante la época en la que ocupó dicho cargo en el Comité Técnico de Árbitros. Tras la llegada de Luis Rubiales a la presidencia de la Federación, la anterior cúpula fue cesada de su cargo y el Barcelona dejó de realizar los pagos a Negreira. La muerte de Sánchez Arminio deja un vacío en lo que respecta a una caso en el que el protagonista, José María Enríquez Negreira, también se negó a declarar alegando que sufría Alzheimer.

La justicia española investiga al club catalán y a algunos de sus dirigentes (como los expresidentes Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu) por «corrupción entre particulares en el ámbito deportivo», «administración desleal» y «falsedad en documento mercantil» por los pagos del Barcelona a ex número 2 de Sánchez Arminio durante la época de ambos al mando de los árbitros.