Manchester se blinda para la batalla entre Mourinho y Guardiola

El United-City del próximo sábado (13:30 hora española) será mucho más que un derbi después de las llegadas de José Mourinho y Pep Guardiola a sus respectivos banquillos.

La rivalidad entre estos dos entrenadores ha hecho aumentar el dispositivo policial común para este tipo de partidos. Tal y como ha informado el periódico inglés Daily Mail, 400 agentes velarán por la seguridad de los aficionados, jugadores y cuerpo técnico tanto dentro de Old Trafford como en los aledaños -terrazas y pubs principalmente.

Una fuente policial habría revelado al citado medio que la decimoséptima batalla Mou vs Pep (tres victorias para el ex madridista, seis empates y siete triunfos del ex barcelonista) podría acarrear daños adicionales: «No hay inteligencia que sugiera que habrá disturbios masivos. Y si bien no afecta necesariamente el elemento de riesgo, la policía es consciente de esta rivalidad y que la llegada de los nuevos gestores podría traer gran tensión».

Sin embargo, el inspector jefe de la policía de Manchester, Dean Howard, ha querido salir al paso de estas informaciones rebajando esta situación de peligro: «Tenemos un montón de experiencia policial, accesorios de alto perfil y trabajamos en estrecha colaboración con funcionarios y grupos de aficionados de ambos clubes».

«La gran mayoría de los seguidores son miembros respetuosos de la ley y esperamos que todos los asistentes disfrutar del juego en un ambiente competitivo, pero seguro, permitiendo a Manchester mostrar una vez más su fútbol», añadió el mismo agente.

El antecedente del año pasado

Según ha podido saber también el mencionado diario, el Manchester United ha formado a cada miembro de seguridad de Old Trafford después de la falsa amenaza de bomba que obligara a suspender el último partido de la pasada Premier ante el Bournemouth.

Además, el club inglés ha puesto en marcha un nuevo plan de estrategia antiterrorista sin escatimar en gastos para garantizar que en caso de una situación de este tipo, no vuelva a producirse de nuevo una metedura de pata de tal calibre.

El último Clásico del Bernabéu, el récord

1.100 policías y 1.400 vigilantes de seguridad se congregaron en el último Real Madrid-Barcelona disputado en el Santiago Bernabéu por el mes de noviembre. El motivo no era otro que la amenaza terrorista que sobrevolaba sobre la capital de España después de los atentados de París acaecidos unos días antes.

Supuso así el mayor despliegue policial nunca antes visto, que casi triplica al que se verá este sábado en Manchester entre otras cosas por la competencia entre Mourinho y Guardiola.