Adiós para siempre a las bombonas de butano que conocíamos: el cambio que llega a España

Las bombonas de butano son un clásico en los hogares de toda España y los avances tecnológicos de la época también han repercutido positivamente en esta herramienta. Ahora en el mercado podemos encontrar bombonas más manejables e incluso con tecnología NFC que ayuda a mejorar el control y seguimiento del producto. Consulta en este artículo las últimas novedades con respecto a las bombonas de butano en España.

Se calcula que las bombonas de butano siguen siendo un imprescindible en alrededor de 3 millones de hogares en España. Esta herramienta se popularizó en la posguerra en una parte de los hogares y, con el paso de los años, se convirtió en un indispensable en casas de toda España. Aunque otras alternativas como el gas natural, las placas solares o calentadores eléctricos le hayan comido terreno en los últimos años, millones de españoles siguen teniendo acceso a agua caliente, fuego para cocinar o calefacción gracias a las bombonas de butano.

Es el Gobierno, a través del Boletín Oficial del Estado, el que fija el precio de las bombonas de butano y la última actualización, que data del 18 de marzo, fijó un coste de 17,67 euros para la clásica botella naranja de 12,5 kilos. La próxima actualización será este 20 de mayo y la variación no podrá ser superior o inferior al 5%, siguiendo lo establecido en la Orden TED/211/2025. El precio de la bombona de butano, que se actualiza el tercer mes de los meses impares, depende de factores como la cotización del butano y propano, los costes del transporte, el tipo de cambio entre euro y dólar o los ajustes de revisiones anteriores.

Las nuevas bombonas de butano

Las bombonas de butano se han renovado con el paso de los años y en los últimos meses tanto Repsol como Moeve (lo que antes era Cepsa) han introducido novedades con estas herramientas. Algunas ya incluso llevan incorporada tecnología NFC para mejorar el control y el seguimiento del producto.

Con el objetivo de renovar su botella tradicional de 12,5 kg, Repsol ha sacado al mercado la botella de 12 kg ligera (NEL) que define en su página web como «un nuevo envase ligero y novedoso, ideal para el ámbito doméstico, que cuenta con la cantidad de gas necesaria para el consumo diario, 12 kg». «Fabricada con acero ligero de alta resistencia y asas de plástico para facilitar su manejo. Es compatible con cualquier aparato de gas butano», informa sobre la compatibilidad de este nuevo diseño con los cabezales clásicos que hay en tres millones de casas repartidas en toda España. «El alto poder calorífico del gas butano te permite ahorrar en costes energéticos, además de que pagas solo por el gas que consumes», dice.

@repsol Respuesta a @Marian1892 La bombona de butano está en muchas casas, pero ¿sabes cómo usarla correctamente? 🤔🏡 Hoy en #Repsolviendo te lo contamos #Bombona #Repsol #ConsejosEnergéticos ♬ Joga – Ghenda & Mc Rd

En los últimos meses, Repsol también ha sacado al mercado una moderna bombona pequeña de butano de 6 kg para las personas que necesitan de este servicio para desarrollar cualquier actividad al aire libre. La califica como un «diseño moderno, ligero y de alta resistencia pensado para adaptarse a cualquier situación».

Moeve en su día cambió el concepto de las clásicas bombonas de butano de color naranja y se introdujo en el mercado con las bombonas de color gris que en los últimos tiempos se han convertido en habituales en las casas de toda España. Su bombona tradicional también tiene un peso de 12,5 kg y en su página web ensalzan su apuesta por la sostenibilidad. «El butano es un gas más respetuoso con el medioambiente. En concreto, para producir el mismo calor o energía que otros combustibles fósiles, el gas butano emite un 45% menos de CO2»; informan sobre una botella «más segura gracias a su guardaválvulas que la protege de cualquier golpe». «Contiene 12,5 kg de gas, pesando en vacío la mitad que las otras botellas tradicionales», dicen.

En los últimos años, estas empresas han hecho una apuesta por la seguridad y manejabilidad, que ha sido la cuenta pendiente de las bombonas de butano a lo largo de la historia. Sus ventajas siguen siendo las mismas: acceder al gas al precio más barato del mercado.