La mala suerte y el árbitro obligan al Castilla a remontar en el Di Stéfano (1-0)
El Real Madrid Castilla cayó derrotado por 1-0 en su visita a Lleida, donde el equipo local, a pesar de ser inferior a los canteranos madridistas, se aprovechó de un tempranero gol y de la injusta expulsión de Álex Salto en la segunda mitad para adelantarse en una eliminatoria que se decidirá el próximo sábado en el estadio Alfredo Di Stéfano.
Había avisado el Castilla de salida con dos fuertes disparos de Mariano que mostraban las intenciones de los canteranos, pero sería el Lleida el que golpearía primero por medio de Oscar Vega, que ponía el 1-0 tras rematar de chilena un balón repelido por Marcos Llorente.
No se pudo cumplir la consigna del vestuario castillista de no recibir gol, aunque los pupilos de Ramis digirieron con gran madurez el palo inicial, y rápido se pusieron manos a la obra para tratar de remontar el resultado adverso.
Tejero avisó en el acercamiento que abrió la lata del ataque blanco en una combinación por banda derecha con Martin Odegaard que finalizó en un fuerte disparo que despejó el meta local Iván Crespo.
Mayoral se mostró muy activo por banda izquierda, y en una de sus repetidas recuperaciones, Febas disparó forzando una buena intervención de Crespo, el más destacado de los primeros 45 minutos por parte local.
Una nueva oportunidad de Mayoral instantes después se encontraría con el inspirado meta del Lleida. No se rendía el Castilla, que indudablemente merecía un gol. Febas se encargó de recalcar esta tendencia con un lanzamiento ajustado que volvía a detener Crespo.
Marcos Llorente, inmenso desde la posición de mediocentro, lograba descolgarse al filo del descanso para empalar un disparo seco que golpeaba el poste derecho de la portería local. Solo había un equipo sobre el campo y el pitido del árbitro fue recibido con los mejores ojos posibles por parte de los locales, que increíblemente se marchaban comandando el marcador.
La reanudación trajo la misma tónica de los primeros 45 minutos, con el Castilla asediando la meta del Lleida en busca de un tanto que le permitiera igualar la eliminatoria. Los locales no se habían acercado a la meta de Carlos Abad tras el gol, pero ya avanzado el segundo tiempo, estuvieron a punto de colocar el 2-0 tras dos claras oportunidades de Suárez y Urko Arroyo.
El árbitro se inventó la expulsión de Salto
La jugada decisiva del partido, al contrario de lo que podría parecer. tendría como protagonista al árbitro del partido, Lax Franco, que enseñaba la segunda cartulina amarilla a Álex Salto en un choque totalmente limpio con un jugador del Lleida. El Castilla tendría que remar más de veinte minutos contra el resultado con un jugador menos por la surrealista decisión del colegiado.
Mariano, insistente aunque muy desacertado durante todo el encuentro, reaccionaba a la expulsión de su compañero con un disparo de falta que salió rozando el larguero de Crespo, demostrando que el Castilla no se rendía a pesar de las adversidades.
Los últimos minutos necesitaron de un gran ejercicio de resistencia madridista ante el acoso del Lleida, que se aprovechó de su superioridad para llegar hasta la meta merengue. Finalmente y con sufrimiento, el Real Madrid Castilla logró mantener el 1-0 adverso, que a pesar de no significar un resultado positivo, le permitirá la opción de remontar en el estadio Alfredo Di Stéfano.