El Liverpool se lleva una final épica tras un penalti de Kepa a las nubes
El Liverpool se proclama campeón de la Carabao Cup tras derrotar al Chelsea en una tanda de penaltis épica que decidió un error de Kepa
El Liverpool se ha proclamado campeón de la Carabao Cup tras vencer al Chelsea en un partido sumamente igualado y competido entre ambos que se ha resuelto en la tanda de penaltis tras 22 lanzamientos, el último de Kepa dio el título a los reds. El encuentro se tuvo que ir hasta la prórroga tras cumplir el tiempo reglamentario con el mismo resultado de inicio, donde los reds fueron levemente superiores pero se encontraron con un inmenso Mendy. Fue la prórroga la que cayó más del lado del Chelsea pero el trofeo copero tendría que decidirse en la tanda de penaltis entre el meta español y Kelleher en un mano a mano que se llevó el jugador del Liverpool.
Se veían algunas muchas banderas ucranianas en las gradas de Wembley ondeando antes del partido, también alguna pancarta que rezaba «el fútbol permanece unido». La guerra está muy presente en el fútbol y se dejó ver. Tuvo especial incidencia en el club blue, que estos días daba a conocer el paso a un lado de su propietario Roman Abramovich, ruso y amigo de Vladimir Putin, al frente de la entidad londinense. Delegaba sus responsabilidades, que no dimitía.
La final arrancó con sumo respeto entre ambos equipos aunque con un leve dominio por parte del Chelsea que llevó al arco red las primeras ocasiones. Una gran triangulación entre Havertz, Azpilicueta y Pulisic acabó con el chut de éste último para la parada de Kelleher, titular hoy ante Alisson Becker, en el banquillo. Fue el paso de los minutos el que llevó a mejorar al Liverpool, que comenzó a merodear el arco de Mendy. Luis Diaz, Mané y Salah tuvieron acercamientos de cierto peligro pero la más clara la tuvieron Keita y Mané, que fue respondido por un doble paradón de Mendy para salvar a los blues en el momento más tenso para ellos. Al borde del descanso, una volea preciosa de Mason Mount rozó el primer gol, pero se fue por muy poco.
El segundo tiempo empezó casi que igual que acabó el primero, con una gran oportunidad de Mount, ésta más cerca aún. El mediapunta estrelló la pelota en la madera tras un pase filtrado del Pulisic que controló con delicadeza con el pecho y le pegó con el interior. La respuesta del Liverpool no llegó hasta bien entrado el segundo tiempo, con un buen intento de Salah que superó con una vaselina a Mendy pero Thiago Silva llegó a tiempo para evitar el gol. El Liverpool lograba derribar el muro de Mendy en la jugada posterior: Matip marcaba al placer en el segundo palo tras un pelota que peinó Mané en un libre directo pero era fuera de juego, el VAR lo anulaba.
El partido entraba en la recta final del tiempo reglamentario y era el Liverpool el que llegaba mejor. Mendy se hacía gigante bajo palos para mantener vivo al Chelsea. Primero escupe un disparo potente de Luis Díaz, el rechace le cae a otro red y responde de nuevo el meta blue. En otra acción posterior, sensacional manopla abajo para echar fuera el testarazo de Van Dijk ya con el tiempo cumplido. Los seis minutos de tiempo añadido no fueron suficientes para resolver quién sería el campeón.
Prórroga de vértigo
Fue el Chelsea el que entró mejor esta vez. La prórroga trajo algo más de lucidez a los blues con un acción muy clara de Werner, que entró en la recta final del tiempo reglamentario. Lukaku combina con el alemán y éste busca la escuadra pero la pelota se la marcha por poco. Era el belga poco después el sí lograba batir Kelleher pero estaba por muy poco adelantado de Van Dijk. Había mucha tensión en el ambiente, cada jugada al límite, y la primera parte de la prórroga acabó con una tangana tras una tonta falta.
Otra vez golpeaba el Chelsea y otra vez era el gol anulado, el tercero de la tarde en Wembley. Havertz recibía la pelota de Marcos Alonso en el área y batía con un fuerte golpe a Kelleher. Ya en la recta final, que llegaba sin claras ocasiones, fue Kepa Arrizabalaga el que saltó al campo para disputar la tanda de penaltis por el Chelsea, pese al gran partido que venía completando su compañero Mendy.
El duelo era ahora cosa de Kepa y Kelleher aunque los que más finan anduvieron fueron los lanzadores. Milner, Marcos Alonso, Fabinho –de panenka–, Lukaku, Van Dijk, Havertz, Alexander-Arnold, James, Salah, Jorginho, Jota, Rudiger, Origi, Kanté, Robertson, Werner, Elliott, Thiago Silva, Konate, Chalobah, Kelleher… todos anotaron hasta el fallo final de Kepa, que tras 21 lanzamientos todos dentro, mandó el 22º a las nubes. El trofeo se queda en las vitrinas del Liverpool tras los cuatro últimos consecutivos del Manchester City.