Los Hispanos saben sufrir: victoria agónica ante Polonia (26-27)

Los Hispanos se llevaron la victoria frente a Polonia por 26-27 en un partido en el que los españoles sufrieron para sacar el triunfo. Los de Jordi Ribera se toparon con el muro de Morawski, pero la gran actuación del portero rival no fue suficiente para evitar el primer triunfo en el Mundial de Balonmano 2021 del combinado nacional.

Después de un arranque con dudas ante Brasil, donde el combinado de Jordi Ribera no pudo pasar del empate, a España le tocaba ganar sí o sí ante otro duro hueso de roer como era Polonia. Los polacos iniciaron este Mundial de Egipto 2021 con triunfo ante Túnez, que será el próximo martes el último rival de los Hispanos en esta primera fase del campeonato. En la segunda jornada, Brasil volvió a empatar ante el cuadro tunecino.

Polonia puso el balón en circulación y desaprovecharon su primer ataque, permitiendo que fuese Ángel Fernández el que inaugurara el marcador a los 3 minutos tras una posesión interminable de los Hispanos que se veía interrumpida constantemente por el poderío defensivo del adversario.  Los polacos respondieron y todo fue igualado hasta que el extremo izquierdo del Kielce y Aleix Gómez fueron capaces de poner el 2-4 favorable para los de Jordi Ribera con diez minutos de encuentro disputados.

El que tuvo que sentarse en el banquillo fue Joan Cañellas después de que el mostrenco Przybylskile cayese encima y provocara que el Hispano impactase su cabeza con el parqué.  Los fantasmas del debut comenzaron a aparecerse. La falta de efectividad de cara a portería empieza a preocupar ligeramente tras ver algunas de las claras ocasiones que los Hispanos desaprovecharon y permitieron a los polacos igualar la contienda.

El gran Morawski

Muchos fallos desde los seis metros que podían haber permitido que España consiguiese un resultado más cómodo, pero la igualdad en el electrónico continuaba. Si no eran por las ocasiones que marraban los Hispanos enviándolas fuera, el que actuaba Morawski, que al igual que el guardameta de Brasil hace dos días, estaba firmando un partidazo defendiendo los tres palos. En la otra portería tardó en aparecer Rodrigo Corrales, pero cuando lo hizo valió para conseguir que los suyos alcanzasen una diferencia de tres goles, gracias también a los huecos que comenzaron a encontrar los de Jordi Ribera, como un gol precioso que se logró gracias a la combinación de la saga Dujshebaev, con Álex asistiendo a Dani.

Ambos guardametas continuaron luciéndose. Tanto Morawski como Rodrigo Corrales parecían pulpos sacando piernas y brazos a mansalva. También mención especial a Aitor Ariño, que campaba por la pista robando balones e interceptando pases como un ratoncillo hurta queso en una cocina. La bocina sonó a la media hora señalando el intermedio y los de Jordi Ribera se fueron a los vestuarios con un 11-14 arriba en el luminoso. Una diferencia de tres goles, como también sucedió el otro día frente a Brasil. Ahora le tocaba a los Hispanos no desperdiciar esa renta en la segunda mitad como ocurriese en su debut ante la canarinha.

El combinado polaco era bien conocedor de que tenía 30 minutos por delante, pero los Hispanos mostraban una buena versión como vigentes campeones de Europa que son. Adriá Figueras y Álex Dujshebaev hicieron los primeros goles de los españoles en el arranque y encontraron las réplicas de Polonia. La gran noticia era que si los pupilos de Jordi Ribera erraban una ocasión porque Morawski la detenía, en la jugada siguiente Rodrigo Corrales replicaba de la misma manera haciéndole un espejo a su homónimo.

Igualdad máxima

Cuando se cumplían los 40 minutos de partido los polacos ya habían recortado distancias hasta ponerse a dos goles de diferencia (17-19) gracias a un Olejniczak, que comenzó a traer de cabeza a la zaga de los Hispanos, y a los latigazos de Sicko. Y a Morawski. Y es que el guardameta polaco puso un muro de ladrillos en su portería que era imposible desbloquear, amargando a las tropas Hispanas y haciendo fuerte a los suyos, que lograron hacer un parcial de 6-0 para terminar dándole la vuelta al marcador con un 20-19.

Joan Cañellas regresó a la pista después de aquel aparatoso accidente de la primera mitad y fue capaz de asistir a Rubén Marchán para que pusiese la igualada y cortase de raíz la mala racha de los Hispanos. La exclusión de Maciej Gebala ayudó para que el capitán Entrerríos y Ángel Fernández, a puerta vacía, volteasen el marcador de nuevo. Instantes después también le cayeron 2 minutos Tomasz Gebala, el hermano de Maciej, lo que permitió que los españoles mantuviesen la renta de un gol.

Nueve minutos restaban para el final y los Hispanos mandaban en el marcador 23-24, por lo que tocaba sufrir en la recta final del encuentro… y más viendo la exhibición de Morawski, al que hasta los equipos de fútbol sala querrían fichar. Ferrán Solé ponía el 23-25 y tocaba a los de Jordi Ribera amarrar el partido para que no se les escapase como frente a Brasil. Cuatro minutos y Gedeón era excluido pero en ese lapso de tiempo los guerreros de Ribera fueron capaces de mantener la renta y recuperar la igualdad numérica antes de que los Hispanos jugasen con uno más durante un minuto.

Majdzinski hizo un favor pisando la línea al tirar, aunque también había detenido Rodrigo Corrales su lanzamiento. Esto derivó en un cañonazo de Joan Cañellas a falta de un minuto y medio con el que puso el 25-27. Mal se tenía que dar, pero en balonmano todo puede ocurrir, es la magia de este deporte. Y aunque la magia es bonita, a todos nos gustan esos trucos de brujería, por suerte para los Hispanos no se dio y España celebró el bocinazo que señalaba el final del partido. Un partido que el combinado que dirige Jordi Ribera ganó por 26-27 para sumar así la primera victoria del Mundial de Egipto 2021.