Fórmula 1

Fernando Alonso y Verstappen son los pilotos más limpios de la Fórmula 1

Fernando Alonso y Max Verstappen no han sufrido ningún accidente ni abandono en todo el Mundial de Fórmula 1 después de 16 carreras

Aston Martin se desangra: 3 millones en reparaciones y un claro culpable

Fernando Alonso, Verstappen
Fernando Alonso y Max Verstappen. (AFP)
Kike Sáez

Fernando Alonso (4º) y Max Verstappen (1º) llegan ‘ilesos’ a las seis últimas carreras del Mundial de Fórmula 1. Entre los dos sólo le han costado 540.000 euros a sus respectivos equipos (Aston Martin y Red Bull) invertidos en reparaciones, un dato que les confirma como los mejores pilotos de la temporada o, al menos, los que menos daño causan a sus monoplazas. A diferencia de sus compañeros, tanto el español como el holandés han conseguido mantener sus coches en un estado impecable, incluso en ocasiones en las que lo llevaron hasta el extremo.

De hecho, en un año de máxima rivalidad entre ambos, Fernando Alonso y Verstappen no suman ni un accidente, ni un problema de motor, ni un sólo abandono en las 16 pruebas disputadas. En el caso de Fernando Alonso, el único gasto que Aston Martin afrontó (331.000 euros) fue para arreglar el fondo plano, que quedó dañado al deslizarse sobre la grava de Montmeló en la calificación del Gran Premio de España.

Por otro lado, Verstappen ha tenido dos incidentes que le han costado alrededor de 210.000 euros a Red Bull. El primero sucedió en la carrera al sprint de Bakú, donde un choque con George Russell destrozó uno de sus pontones. Tras la prueba, el bicampeón del mundo fue directamente a recriminarle lo sucedido al piloto de Mercedes: «Tienes que dejarme espacio, tienes que dejarme espacio». El otro fue surrealista y sucedió en una situación inesperada. Cuando salía de boxes en Silverstone, rompió su alerón delantero al impactar con un pequeño muro al marcharse del garaje austriaco.

Compañeros de Alonso y Verstappen

Sin embargo, sus compañeros no pueden decir lo mismo. Lance Stroll (10º) y ‘Checo’ Pérez (2º) son dos de los tres pilotos cuyos accidentes o problemas en pista más dinero han costado a sus equipos. El canadiense se ha desplomado en la tabla en los últimos nueve Grandes Premios, en los que tan sólo ha cosechado un total de siete puntos. Además, ya encadena cuatro seguidos sin puntuar. De hecho, en los dos últimos apenas llegó a competir –no corrió en Singapur y abandonó en Japón–.

Poniendo como ejemplo la última carrera en el Gran Premio de Japón, el abandono de Stroll no sólo supuso una pérdida considerable de puntos a Aston Martin, sino también económica. Un problema en su alerón trasero le obligó a abandonar la prueba y supuso una nueva fisura. Así, ya suma alrededor de 2.500.000 euros invertidos por la escudería británica en reparar daños de su monoplaza.

El caso de Pérez fue aún más grave. El mexicano perdió varios posiciones en la salida de la prueba en el circuito de Suzuka, donde sufrió un choque con Lewis Hamilton que le mandó a boxes nada más empezar. Poco después, ya con los neumáticos duros colocados en busca de una épica remontada, tuvo un brutal impacto con Kevin Magnussen al intentar adelantarlo que le llevó al abandono en la vuelta 15.

Aun así, el segundo mejor piloto hasta la fecha sigue obcecado en un objetivo que su propio equipo, Red Bull, ve imposible. Más aún después de sus últimas actuaciones. Con 2.300.000 euros a sus espaldas, el mexicano vaticinó lo siguiente en soymotor: «Me atrevo a decir que ahora estoy de nuevo al 100%. Y también tengo de nuevo la convicción de que puedo tener una oportunidad de pelear por el título el año que viene».

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