Liga Santander

Este Barcelona es una ruina

El peor Barça de las dos últimas décadas aparece en el peor momento: las claves de una crisis deportiva e institucional que aleja al equipo de la Liga

messi
Messi, en el partido contra el Cádiz. (AFP)

Bien podría ser un indicativo de competitividad o la máxima igualad que impera esta temporada en la Liga Santander, pero acude y refleja más el caos que reina este año en el Fútbol Club Barcelona. Los culés, tras estas 10 primeras jornadas disputadas, están más cerca del descenso que de los puestos de Champions League tras haber luchado por los primeros 30 puntos que tuvieron en juego y haber cosechado ni la mitad de los que estuvieron en juego, 14. Es desde ya el peor registro de la historia del club.

Jamás el Barça, desde que en la competición española se usa este sistema de puntos (tres por victoria y no dos), allá por 1995, había cosechado tales números tras haber disputado las primeras 10 jornadas de LaLiga. En las últimas 22 ligas, el Barça siempre había acabado la primera decena de enfrentamientos con más puntos que este curso 20/21. Uno más, dos más… pero siempre había hecho mejores números. Este equipo, el de Ronald Koeman y Leo Messi, fija desde hoy un nuevo precedente nefasto.

El peor procedente anterior data de la temporada 2002/03, en plena reconstrucción del club y con otro entrenador holandés en el banquillo: Van Gaal. El holandés duró 19 partidos al frente del Barça tras un inicio terrible pero en la Jornada 10 caminaba décimo con 15 puntos, uno más que el Barça actual que es, de momento, séptimo con estos números. Aquel equipo no llegó a clasificarse para la Champions, sí para la UEFA, con 56 puntos, a 22 de un Real Madrid campeón.

¿Pero qué le ha llevado al actual Barcelona a esta terrible crisis de resultados? Son varios los detonantes o justificantes de tal racha, desde los problemas institucionales que arrastra el club hasta la nefasta planificación deportiva ejecutada este verano. El club se desmorona por muchos frentes y eso ha llegado hasta la orilla del vestuario, viéndose salpicado en rendimiento y regularidad.

Circo institucional

Ajeno al fútbol, el año 2020 para el Fútbol Club Barcelona será recordado como uno de los más aciagos de su historia. Este año es el inicio del fin de una etapa y todo comienza en los escalones más altos de la entidad deportiva. La gestión de Josep María Bartomeu termina de explotar con la evolución del Covid-19 y los efectos de la pandemia en la estructura económica del fútbol. Numerosos escándalos nublan a la Junta Directiva, ERTE, reducciones salariales forzosas, tensión con la plantilla, marcha de Luis Suárez… El adiós de Bartomeu abre paso a unas elecciones que mantienen la inestabilidad en cada esquina del club.

Fin de ciclo

Aunque fue difícil de digerir, el Barça levantó el cartel del fin de ciclo tras la pasada eliminación de Champions League. Colgó el cartel de transferibles a media plantilla pero la revolución que venía a iniciar Koeman quedó en nada. Apenas fichajes, apenas novedades en una plantilla sin grandes líderes y con una vieja guardia que llega a su ocaso. Los Piqué, Busquets y Jordi Alba están en la recta final de sus respectivas carreras y su rendimiento así lo demuestra.

Leo Messi

Lo de Leo Messi merece una mención aparte. El argentino, que decidió marcharse en septiembre pero al que no le dejaron tomar su camino, está ante su peor temporada deportiva. Nula motivación, malestar con la directiva, sin referentes sobre el campo… llevan a Messi a su peor versión, ya no solo numérica, con pocos goles en su haber si se desligan las pena máximas, sino que también por la sensación que deja sobre el césped: abatido y pasota.

Los nuevos no dan la talla

Los nuevos, la nueva era del club, no dan el nivel que se espera en el Fútbol Club Barcelona. A los talentos jóvenes aún se les da un margen de adaptación para tirar del carro, los Pedri, Dest, Trincao, Mingueza o incluso De Jong. Pjanic llegó en su ocaso y Braithwaite, Lenglet o incluso Griezmann no son la panacea que necesita un club carente de emblemas.

Los números como visitante

El Barça como visitante ha sido una sombra de sí mismo. Solo fue capaz de ganar al Celta de Vigo allá a principios de octubre (0-3). Tras aquel inicio, se ha sucedido cuatro partidos sin lograr el triunfo, sumó solo un punto ante el Alavés (1-1). Derrotas ante el Gebtafe (1-0), Atlético de Madrid (1-0) y la última ante el Cádiz (2-1). Un punto de los últimos 12 ensalzan la debacle a domicilio.

En casa, dudas ante los cocos

En el Camp Nou ha sumado gran parte de su triunfos, con algunos partidos muy solventes como ante el Villarreal o el Osasuna, también ante el Betis en un segunda parte meritoria. Pero en los duelos ante el Sevilla y ante el Real Madrid, otros dos equipos Champions, el Barça cedió puntos. Ante los andaluces se dejó dos en aquel 1-1; ante los blancos en el Clásico se desangraron con el 1-3 a finales de octubre.

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