Elisa Mouliaá contra la revista Cuore por su trato a la mujer

Elisa Mouliaá la actriz que vemos en el personaje de Nora Salgado en la serie ‘Olmos y Robles o en ‘Aguila Roja’, está indignada con la revista Cuore. Elisa habla en contra de reportajes que hace esta revista donde señala en fotos ‘defectos de las famosas’. Abdomen flácido, cartucheras o celulitis son problemas comunes en millones de mujeres.

Cuore u otras publicaciones hacen mofa de ellos.  Lo curioso es que Cuore dice ser ‘la única revista que sube tu autoestima, ¿la subea consta de meterse con famosas? Elisa Mouliaá opina “que tienen el alma podrida”.

Ya está en los kioskos el número anual que hago con @villarrazomadrid y @cucocuervo para #DiezMinutos! 🙂 millones de gracias! #felizlunesatodooos

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Elisa Mouliaá contra la revista Cuore por su trato a la mujer

La actriz tiene toda la razón en lo que expone en su Twitter. Sin embargo no solo la revista Cuore ‘en general la estética que se impone a la mujer’ (incluso ahora también al hombre) busca la perfección.

Nada de curvas, cuerpos tonificados, ‘tableta’ de abdominales, y ‘guerra al michelín’. Desde el cine o la televisión se busca ‘la perfección’. Se promocionan reality shows donde la gente busca transformarse para lograr sentirse mejor con ellos mismos físicamente, y se hace espectáculo de los complejos, las dudas e inseguridaades de muchas personas.

Esta semana en #Cuore535 nos colamos en la fiesta de cumpleaños de Jennifer Lopez, y Quim Gutiérrez, ¡al desnudo! pic.twitter.com/UYXSpGWrrU

— Revista CUORE (@cuore) August 2, 2016

Sin embargo quizás ‘decir que tienen el alma podrida’ es un poco fuerte. Pero da que pensar…, ¿vale todo con tal de vender?

En la revista Cuore hay distintas secciones no en toda se señalan los defectos de famosas y famosos. Aunque a menudo  hay artículos de este tipo se marcan los defectos de famosas. A veces ‘fotos tomadas en un mal momento’. Por muy guapa o guapo que sea un famoso les puede sacar con más tripa o arrugas.

@cuore #topculazos #lecturaligera para el #verano ya en tu quiosco pic.twitter.com/y9T7kqVhEi

— quiosco colon (@quiscocolon) July 27, 2016

En realidad Coure lleva al extremo lo que muchas mujeres hacen entre sí en privado, ‘criticar a otras’. Quizás tú no o yo ahora pero si alguna vez a lo largo de la vida, hemos criticado a alguien. Hay mujeres que se sienten mejor ‘criticando a otras’ y si son guapas y famosas mejor.

Estos pendientes son lo más original del dia…y lo sabes!

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A mi me resulta admirable que una modelo como Cara Delavigne que sufre psoriasis haya desfilado en Milán con manchitas en las piernas. Se le sacan fotos porque es modelo, pero que también se vea que su enfermedad no impide realice su trabajo de maravilla. La noticia no me parece que ella sufra psoriasis sino que se acepte con naturalidad quien sufre esta o cualquier otra enfermedad sin estigmatizarla.

Mensaje de Elisa Mouliaá en Twitter

“Estoy indignada. La revista Cuore, cuya portada y contenido denigra y ridiculiza a la mujer es una auténtica plaga. Esta prensa absurda y sensacionalista hace muchísimo daño a la sociedad cuestionando constantemente el cuerpo de la mujer”

La revista consiste en poner fotos robadas de actrices en la playa cuyos defectos son señalados, criticados, parodiados y ridiculizados con onomatopeyas desagradables como «Argg» o «buaj». Entre más cosas. Estos mensajes potencian un prototipo de mujer ‘perfecta’ inexistente. Quizás hay mujeres que coinciden con ese prototipo, pero los cuerpos cambian con el tiempo, y hay muchos tipos de mujeres y de complexiones físicas al igual que hay muchos tipos de gustos en la elección sexual de cada uno.

Esto perpetúa la inseguridad de toda mujer que compra la revista y luego se mira al espejo.

Es normal que Belén Rueda o Ana Duato no tengan la tripa más dura del universo (porque señores, tienen más de 40 años y son capaces de aceptar su madurez) pero son mujeres que se comen la pantalla y la llenan de luz y colores.

Estoy harta de que el cuerpo de la mujer sea constantemente el foco de atención, de leer que si tal o tal famosa se ha pasado comiendo o tiene los brazos flácidos.

Somos actrices, señores, no maniquíes, nosotras contamos historias. No somos esclavas de vuestros estúpidos mensajes. Somos mujeres que crecemos y creemos en nosotras mismas, y estamos a gusto con las caderas anchas, las piernas cortas o los pechos pequeños, y somos bastante más felices de lo que seréis jamás vosotros, que os lucráis criticando a la mujer pero tenéis el alma podrida.»