Así fue la carrera en EEUU: remontada frustrada de Alonso y podio inesperado de Sainz
La carrera en el Gran Premio de Estados Unidos estuvo marcada, entre otras cosas, por el abandono de Fernando Alonso y el podio sorpresa de Carlos Sainz
¡Carlos Sainz sube al podio en Austin!
Fernando Alonso y Carlos Sainz han vivido un fin de semana extraño, pero con final feliz en el Gran Premio de Estados Unidos. Por un lado, el asturiano estuvo cerca de lograr una épica remontada en la carrera de Austin después de salir desde el pit lane, pero pilotó de manera tan extrema su Aston Martin que acabó dañando su fondo plano, lo que le obligó a abandonar a menos de diez vueltas del final.
Por otro, el de Ferrari realizó una prueba muy sólida, gestionada a las mil maravillas por un equipo que lo que te quita te lo da. Si en el sprint tomó una mala decisión con la estrategia colocándole neumáticos blandos de salida, en la carrera del domingo optaron por un plan a dos paradas que, sumado al gran pilotaje del madrileño, se transformó en un buen cuarto, puesto que mutó a podio.
Y es que Sainz heredó la tercera posición de Lando Norris, que pasó a ser segundo tras la descalificación de Lewis Hamilton. El de Mercedes no fue el único piloto cuyo resultado fue anulado, puesto que el coche de Charles Leclerc también tenía irregularidades en el suelo. Transcurridas unas horas desde el final de la carrera, la FIA anunció estas dos descalificaciones, generando un baile de posiciones en la clasificación final de la prueba en Austin.
Sainz consiguió llevarse puntos, 15 concretamente, al contrario que Alonso, que se marchaba de vacío por segunda vez en el Mundial de 2023. Como decimos, los dos pilotos de Aston Martin salían desde el pit lane tras romper el parque cerrado, incluso detrás de los de Haas, que hicieron lo mismo. Aun así, el buen ritmo y la estrategia a dos paradas con el asturiano sirvieron para que se llegase a meter entre los diez primeros, pero finalmente se acabó consumando su primer abandono con su nuevo equipo.
Sainz y Alonso sacan algo positivo
Y es que Aston Martin vivió un final agridulce en el Circuito de las Américas. Después de dos días llenos de problemas tanto en la clasificación como en el sprint, incluso con un monoplaza totalmente mejorado, el pasado domingo dio un atisbo de resurrección gracias a sus dos pilotos. Por un lado, Lance Stroll acabó séptimo, entre otras cosas, por las descalificaciones.
El caso de Alonso fue el más desgarrador para los aficionados españoles. Y es que el bicampeón del mundo estuvo a punto de cerrar una de las remontadas más épicas de su carrera, pero su fondo plano, dañado después de casi 50 vueltas, no le permitió terminar la prueba y se tuvo que retirar a escasos minutos de cruzar la meta por última vez.
Aun así, Aston Martin tuvo ritmo. Así lo confirmó el propio Alonso en sus declaraciones después de la carrera: «Ha sido una supercarrera para nosotros, con una gran remontada y mucho ritmo para haber salido desde el pit lane. Podía haber terminado octavo, es una carrera muy buena».
Los gritos de Verstappen
Otro de los momentos más destacados en Austin fueron los gritos y el enfado monumental de Max Verstappen, el ganador de la prueba, con Red Bull. El tricampeón del mundo se llevó su carrera número 50, la más sufrida de este año en la Fórmula 1 y, si normalmente tiene subidas de tono por radio, lo del pasado domingo con su equipo fue memorable. El holandés llegó incluso a mandar callar a su ingeniero en una frenada: «Cállate, no me hables cuando estoy frenando».