Alexia Putellas: el origen del pique con la Federación y unas exigencias poco realistas
OKDIARIO desmonta las exigencias y quejas realizadas por Alexia Putellas a la Federación, tras consultarlo con varios de los afectados
Alexia Putellas, Irene Paredes y Misa Rodríguez declararán como testigos en el ‘caso Rubiales’
Las explicaciones de Alexia Putellas sobre la crisis de la selección femenina y las exigencias que reclamaron fueron claras. Sin embargo, no son del todo realistas. Al menos, así lo deja patente las consultas realizadas por OKDIARIO a los algunos de los afectados por estas reclamaciones. En ellas, detallan las explicaciones de cada una de las situaciones reveladas por la doble ganadora del Balón de Oro, que no la dejan en buen lugar.
En la comparecencia realizada por Alexia, lo más revelador es el maltrato que dice haber sufrido la selección femenina durante los últimos años por parte de la Federación. Se quejó de viajar en autobús en lugar de avión a las sedes de los partidos en torneos amistosos, durante los parones internacionales. Algo que considera un perjuicio, dado que provocaba un desgaste mayor al de sus rivales.
Fuentes consultadas por este medio afirman que esa circunstancia se dio en la Arnold Clark Cup en 2022. Comentan que «cuando vas invitado a un torneo, es el organizador el que se encarga de todos los viajes», algo que exculparía a la Federación Española de un trato discriminatorio. El ente federativo, al que reclaman esta desigualdad sobre la selección absoluta masculina, no tendría la culpa, según cuentan, debido a que ellos no son los encargados de cerrar los desplazamientos internos en estos casos y que es una tradición que los anfitriones organicen estos eventos y que siempre miren por los suyos, en este caso Inglaterra.
Otra de las quejas de la futbolista del Barcelona es que tuvieron que para coger un vuelo de madrugada para acudir a la previa de un partido. «No eran horarios de deportistas de élite, que tienen como prioridad entrenamiento, comidas, y descanso», destacó Putellas. Esa afirmación es también rebatida. Esas mismas fuentes señalan a los viajes que suelen hacerse al término de los partidos, en los que se aterriza a las 7 u 8 de la mañana y, después, los jugadores entrenan por las tardes. La práctica es habitual en los equipos de fútbol profesional y hasta en la selección masculina absoluta. «¿Acaso ellos no quieren cuidarse? No está acreditado que haya habido más lesiones viajando a estas horas mientras luego se descanse adecuadamente», apuntan.
Alexia, en su lesión en la Eurocopa
Las exigencias de Alexia Putellas quedan desacreditadas por estas fuentes, al contar lo que sucedió en la Eurocopa 2022, justo antes de que se produjera la renuncia de las 15 jugadoras tras caer en cuartos de final de la Eurocopa ante la futura campeona Inglaterra. Aunque la mejor jugadora del mundo no formaba ya parte de la expedición, por lesión, ese día posterior a la eliminación las jugadoras sí habían solicitado vuelos antes de las 7:00 horas «para comenzar antes sus vacaciones».
Además, apuntan que cuando Alexia se tuvo que retirar de la concentración a pocos días del debut en el campeonato continental de 2022, exigió a la RFEF un vuelo privado para regresar de Inglaterra a Barcelona: «La Federación no lo vio conveniente porque se podía regresar en clase business directa a Barcelona, pero parece que no ha perdonado que no se le pusiera un avión particular». Hay que recalcar que ningún jugador de la absoluta masculina ha viajado nunca en avión privado de regreso a casa cuando se ha producido una lesión durante un torneo.
El acuerdo que Alexia Putellas se calló
Cuando se produjo el incidente de que las jugadoras tuvieron que levantarse de madrugada, Luis Rubiales, al frente de la RFEF por aquel entonces, se enteró de lo sucedido. Estas fuentes confirman que el ya ex presidente «dijo que no se volviera a producir y firmó un acuerdo de viajes con las capitanas. Alexia y Paredes no han hecho la más mínima mención a este hecho», revelan estas fuentes a OKDIARIO.
Por último, comparten que las peticiones de las futbolistas causan un agravio comparativo con equipos como la selección de fútbol sala «que es varias veces campeona del mundo y de Europa» o la sub-21, «vigente subcampeona olímpica». Lo que reclaman las jugadoras de la selección femenina –y a lo que se ha accedido paulatinamente por parte de la RFEF– son «condiciones que no han tenido nunca» los equipos anteriormente citados y que también merecen un respeto como dominadores de su categoría.