Victoria del español en tres sets (4-6, 6-4, 6-4)

Alcaraz remonta a Djokovic en la exhibición ‘comprada’ por Arabia Saudí

Carlos Alcaraz se impuso a Novak Djokovic (4-6, 6-4, 6-4) en el partido de exhibición pagado por Arabia Saudí que cierra 2023

Alcaraz Djokovic
Djokovic y Alcaraz, antes del comienzo del partido. (Riyad Tennis Cup)
Nacho Atanes
  • Nacho Atanes
  • Redactor de deportes y canterano de OKDIARIO. Desde 2016 cubriendo la información de tenis. También baloncesto, fútbol, ciclismo y otros contenidos.

Carlos Alcaraz y Novak Djokovic cerraron la persiana de 2023 en el tenis mundial, a la vez que abrían, de alguna forma, el capítulo correspondiente a la temporada 2024. Todo ello se produjo en un solo acto, de carácter amistoso y explicado desde el poderío económico de un país emergente en lo que al deporte y al tenis se refiere, Arabia Saudí, que consiguió juntar, talonario en mano, a los dos mejores jugadores de la actualidad para que se enfrentaran en un partido de exhibición en el que vimos grandes puntos y del que, quizá, lo de menos fue el resultado. La victoria final fue para Alcaraz, remontada incluida, por 4-6, 6-4, 6-4.

Alcaraz y Djokovic se batieron en duelo durante una hora y 52 minutos, en un evento organizado como parte de la Tennis Cup de Riad, y en el que el público local pudo disfrutar de lo lindo con las virguerías del número uno y el número dos del ranking ATP. Carlos y Novak, que vienen de una temporada en la que se han medido en cuatro ocasiones, en escenarios extraordinarios por su aura competitivo y con todo en juego, pudieron relajarse y echar un partido amistoso del que, eso sí, salieron retales de competitividad por ambos lados.

Ambos tenistas cumplieron con su cometido y Arabia Saudí también dejó constancia, si no lo había hecho ya, de que ha llegado al tenis para quedarse. Si bien este tipo de exhibiciones llevan tiempo produciéndose, juntar a los dos mejores jugadores del planeta, Carlos Alcaraz y Novak Djokovic, justo en el momento en el que aspiran a lanzar su órdago de entrada a la alta competición tenística, es una prueba de que sus aspiraciones de lograr un Masters 1000 para 2025 y las WTA Finals desde 2024 son notables.

El evento se celebró en un lugar que podría repetir más adelante como el Kingdom Arena de Riad, con capacidad total para 40.000 espectadores y que se llenó en el espacio habilitado para el partido, donde Alcaraz y Djokovic dejaron golpes majestuosos, haciendo las delicias de un público que aplaudió a rabiar durante la duración total del partido. Con un Novak más acostumbrado a gestionar este tipo de citas de exhibición, Carlitos también fue soltándose y ambos acabaron aunando nivel en los intercambios y gestos cómplices para la galería.

Alcaraz y su venganza amistosa ante Djokovic

El primer set cayó del lado de Djokovic, más acertado en el momento de decisión del parcial, aunque sin la competitividad de un torneo ATP, ni el ganador, en este caso del set, ni el perdedor, mostraron sentimientos más allá del show en el que ambos estaban inmersos. Tal y como suele suceder en este tipo de exhibiciones, entre grandes tenistas, el segundo parcial iría a parar al bolsillo de Alcaraz. En esta ocasión, el español estuvo por delante del número uno del mundo, con un break logrado al inicio y que supo gestionar, sin mayor oposición.

El set definitivo, para alegría de los presentes en Riad, decidiría al campeón de la Tennis Cup, en su versión masculina –Sabalenka se impuso a Jabeur en el partido de chicas– y Alcaraz se llevaría el gato al agua, rozando las dos horas y en un parcial en el que sí se vieron más alternancias. El español se adelantó en el luminoso, antes de que Djokovic igualara mediado el set. Con 4-4 en el marcador, un juego larguísimo caería del lado de Carlos, en forma de break definitivo para que, con un revés paralelo, el español se llevara el triunfo del partido que cierra 2023 y que abre camino a todo lo bueno que nos espera en el tenis en 2024, aunque esta vez con la competición por delante.

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