La falta de previsión de Puig pone a la Sanidad valenciana al borde del colapso en pleno repunte covid
La Sanidad valenciana está a las puertas de la peor crisis de su historia. La falta de previsión del socialista Ximo Puig, el repunte de los positivos en la nueva ola de la pandemia, la carencia de médicos y de personal y las vacaciones de verano -que ahora mismo afectan a un tercio de la plantilla- sitúan al Gobierno valenciano en una situación crítica, con el sistema sanitario amenazando colapso. Hasta el pasado 26 de junio, el Ejecutivo autonómico no había presentado el plan de refuerzo y vacaciones.
Según el mapa que establecen distintas fuentes, la situación hospitalaria es la siguiente: el Consorcio Hospital Universitario de Valencia ya está prácticamente colapsado, como lo demuestra el hecho de que ayer 47 pacientes estuvieran a la espera de una cama, según informó el Comité de Empresa. De ellos, algunos llevaban más de 48 horas esperando y, al menos 3, superaban los 3 días de espera. El problema de este hospital es de hondo calado y su personal se siente ninguneado porque la Consejería de Sanidad no les escucha.
La Comunidad Valenciana cuenta con una población SIP en torno a los 5,2 millones de personas. En el caso del Consorcio Hospital Universitario de Valencia, tiene asignadas por encima de las 373.000, de las que más de 71.000 corresponden a personas con más de 65 años, 2 de cada 10, por lo que todo apunta a que, además, el problema irá agravando en los próximos días.
Los expertos también prevén una situación complicada en próximas fechas, principalmente, en los hospitales de la provincia de Castellón y, ya al sur de la Comunidad Valenciana, en el de Torrevieja. Pero advierten que antes o después todos la sufrirán.
Fin de contratos covid
En el fondo del problema subyace varias causas. Una de ellas, relacionada con los contratos covid. El virus está repuntando a pasos agigantados, lo que incrementa el trabajo sobre todo en Urgencia y en Atención Primaria. A ello, se une que los contratos covid se finiquitaron la pasada primavera, a lo que se achaca ahora la falta de previsión en parte. Sobre todo en comparación con otras Comunidades. Andalucía, por ejemplo, los prolongó hasta el próximo 31 de diciembre y Castilla La Mancha hasta el 1 de septiembre.
Plan tardío
Los médicos consideran que el plan de vacaciones y refuerzos ha llegado tarde, porque no se presentó hasta el pasado 26 de junio, a apenas cuatro días del inicio del mes de julio: el mes que marca el principio de las vacaciones, con la siguiente paradoja: se encuentra de vacaciones en torno a un tercio de la plantilla y los refuerzos son «insuficientes», sobre todo en la costa, porque el incremento poblacional con la llegada de turistas no se corresponde con el de efectivos. En la Región de Murcia, por ejemplo, el plan de vacaciones ya se conocía desde el pasado 1 de junio. Y, en Cataluña, los refuerzos ya estaban trabajando desde mediados de mes.
Reducción de consultorios
Y, finalmente, los Consultorios. El diputado popular José Juan Zaplana sostiene que en el último año de Gobierno de Partido Popular (2014) se abrieron en periodo vacacional 47 consultorios en la costa. En 2021, esa cifra quedó reducida a 32. Y, en este verano, a 21. Como la reducción de consultorios no ha ido aparejada de un descenso de los pacientes y los refuerzos médicos, según los sindicatos, son insuficientes, los facultativos se encuentran con un escenario de saturación de pacientes, cuya media supera incluso el número de consultas diarias aconsejadas por las sociedades científicas (25), según fuentes del Sindicato Médico.
Además, en algunos casos, hay lo que califican como deficiencias de material y medios. En el consultorio auxiliar de El Campico, en Guardamar de Segura, tal como ha publicado OKDIARIO, no hay destructor de papeles, con el consiguiente riesgo para la salvaguarda de determinados datos, según ha denunciado el citado sindicato: esos papeles se almacenan en una caja de cartón. Tampoco, hay biombo para garantizar la intimidad de los pacientes que deben ser auscultados, según las mismas fuentes, ni dónde guardar el material medico.