Clonación: ¿estamos jugando a ser dioses?
La clonación nos enfrenta a un dilema fascinante y aterrador: la capacidad de jugar a ser dioses, con el poder de crear y alterar la vida.
Conoce más sobre la clonación
Clonación, ética y realidades en el siglo XXI
¿Es posible la clonación humana?
Stephen Hawking lo confirmó: puso fecha al 'fin del mundo' y la NASA le da la razón
Baterías Sostenibles: la revolución de la energía limpia
La clonación es uno de los temas más controvertidos en la historia de la ciencia. Representa un avance arrollador sobre la naturaleza, pero también genera múltiples interrogantes e inquietudes, tanto éticas como científicas. Para algunos, es como jugar a ser dioses, una idea que aterra a un grupo de científicos, pero entusiasma a otro.
Desde la creación de la oveja Dolly en 1997 no ha cesado la polémica en torno a la clonación. Pese al rechazo frente a este procedimiento por parte de no pocos expertos, lo cierto es que ha seguido avanzando y en 2024 permitió la clonación de un primate. Esto significa que estamos a un paso de clonar humanos. ¿Qué consecuencias podría traer todo esto?
La clonación
El nacimiento de la oveja Dolly marcó un antes y un después en la historia de la biotecnología. Este animal fue el primer mamífero clonado a partir de una célula adulta. Este procedimiento consistió en extraer el núcleo de una célula de la glándula mamaria de una oveja y transferirlo a un óvulo al que previamente se la había extraído el núcleo. Después, hubo una gestación subrogada.
Con Dolly se demostró que era posible clonar un organismo completo. Muchos compararon este logro con hitos como la llegada a la Luna y no era para menos. Desde entonces, la técnica ha evolucionado bastante. Se han clonado perros, gatos, caballos e incluso especies en peligro de extinción. Lo más reciente fue la clonación de un mono Rhesus en China, en 2024.
La clonación ha sido un gran aporte a la biotecnología. Pese a las inquietudes que provoca, estos conocimientos han sido decisivos para el mejoramiento de algunas razas de animales, así como para la conservación de la fauna y la investigación biomédica.
¿Clonación humana?
Frente a la posibilidad de clonar seres humanos ha habido muchas especulaciones. Uno de los casos más sonados fue el de “Eva”, una mujer que se anunció como el primer ser humano clonado, por parte de la compañía Clonaid. Su nacimiento se anunció en 2002, pero no se presentaron evidencias científicas de la clonación como tal.
A pesar de que el caso Eva tuvo gran resonancia en los medios de comunicación, su impacto en la ciencia fue nulo. Jamás se le dio crédito a esta historia. Pese a todo, abrió un agudo debate sobre los límites éticos de la clonación. Así mismo, propició análisis jurídicos en torno al tema.
De todos modos, clonar humanos sigue siendo un objetivo lejano y difícil de lograr, debido a los riesgos técnicos. El proceso puede implicar alta tasa de fallos, anomalías genéticas y la posibilidad de envejecimiento prematuro. A estas limitaciones científicas se suman una serie de inquietudes éticas.
Grandes riesgos
Uno de los aspectos más problemáticos frente a la posibilidad de clonar seres humanos es el riesgo de que se anule el derecho a la identidad genética. Al clonar a un individuo se replica por completo su ADN. Por lo tanto, cada ser a la que se le aplique ese procedimiento deja de ser único. El clon, en particular, ¿debe construir una identidad como “copia” o de forma autónoma?
Así mismo, la clonación puede dar lugar a intervenciones genéticas de gran envergadura. Se corre el riesgo de que haya intentos por crear “seres óptimos”, o particularmente bien dotados en algún aspecto. Si esto se hace, podrían aparecer “seres en masa” destinados a un trabajo específico o a un ejército, por ejemplo.
También están los que condenan a priori la clonación por considerarla un desafío a creencias sagradas. Se asume que los científicos están jugando a ser dioses y que esto traería alguna forma de desgracia o castigo.
La pregunta es: si los riesgos técnicos pudieran eliminarse, ¿podría considerarse una técnica reproductiva más? Este debate exige superar los miedos irracionales y centrarse en los posibles beneficios, como el tratamiento de enfermedades y la evolución de la medicina regenerativa.
La Perspectiva Religiosa
Desde una perspectiva religiosa, la clonación plantea preguntas sobre el papel de lo divino en la creación de la vida. Muchas tradiciones creen que sólo una entidad superior tiene el derecho de crear y dar vida, lo que lleva a la controversia sobre si los humanos deberían tener la capacidad de alterar procesos naturales. La idea de «jugar a ser dioses» resuena en el discurso religioso, sugiriendo que la ciencia podría sobrepasar límites que deberían ser respetados.
El Futuro de la Clonación
A medida que la tecnología avanza, es probable que la clonación se convierta en una práctica más común. La posibilidad de clonar órganos para trasplantes o incluso revivir especies en peligro de extinción son áreas que despiertan tanto interés como aprensión. Sin embargo, el camino hacia la aceptación y regulación de la clonación será complejo y estará marcado por debates éticos, legales y sociales.
La ciencia ofrece oportunidades sin precedentes, pero también conlleva una responsabilidad monumental. La clave estará en encontrar un equilibrio entre el progreso científico y el respeto por la vida en todas sus formas.
Lecturas recomendadas
Temas:
- Clonación