Alerta global por lo que han encontrado en el fondo del Mediterráneo: puede cambiarlo todo

Lo que han encontrado los científicos en el fondo del Mediterráneo puede cambiarlo todo. Sin duda alguna, habrá llegado ese momento en el que tenemos que empezar a pensar en un cambio de ciclo que puede acabar siendo lo que marque un antes y un después. Ese cambio climático que estamos viendo llegar en unos días en los que quizás hasta ahora no pensábamos que tuviéramos en mente. Son tiempos de ver llegar un cambio importante que hasta el momento no pensábamos que podríamos tener.

El mar es la última frontera y puede acabar siendo la antesala de algo más, de la mano, de una serie de detalles que van de la mano y que realmente pueden acabar siendo lo que marque un antes y un después. Por lo que, habrá llegado el momento de apostar por una serie de elementos que hasta la fecha nunca hubiéramos tenido en cuenta. Este nuevo estudio pone de manifiesto un problema en el fondo del mar que afecta a la superficie del planeta. Lo que hay en el fondo del Mediterráneo puede cambiarlo todo y obliga a activar una alerta global.

Puede cambiarlo todo por completo

Los últimos descubrimientos pueden cambiarlo todo, en esencia, estamos ante una serie de situaciones en las que todo es posible. Con ciertas novedades destacadas que quizás hasta ahora no habíamos tenido en cuenta. Son días de cambios que quizás hasta ahora no pensábamos que podríamos tener.

Hemos visto como la temperatura global del planeta ha aumentado por momentos. En los últimos veranos, el mar ha llegado a una temperatura extremadamente alta que ha dado con algunas novedades destacadas que puede ser fundamental en estos días.

Por lo que, habrá llegado ese momento de empezar a pensar en una serie de cambios que pueden empezar a ponerse sobre la mesa. Con ciertas novedades que pueden acabar siendo los que marcarán una diferencia importante. El fondo del mar puede acabar convirtiéndose en un lugar extraño.

Es la hora de saber en todo momento qué es lo que puede pasar en este futuro que tenemos por delante. Nos puede descubrir un elemento que puede acabar siendo el que realmente nos haga pensar en estos cambios que tenemos por delante. Puede cambiarlo por completo todo este increíble descubrimiento que quizás hasta ahora no habíamos visto llegar.

Lo que han encontrado en el fondo del mar Mediterráneo puede cambiarlo todo

El fondo del mar Mediterráneo ha revelado algo increíble, que quizás hasta ahora no habíamos ni imaginado. Estamos ante una serie de descubrimientos que pueden ser claves en estos días que tenemos por delante y pueden ser sorprendentes en muchos aspectos.

Tal y como explican desde la Universidad de Barcelona: «El descubrimiento lo presenta un artículo publicado en la revista Marine Pollution Bulletin, que tiene como autores principales a Miquel Canals, de la Facultad de Ciencias de la Tierra de la UB; Georg Hanke, del Centro Común de Investigación (JRC) de la Comisión Europea; François Galgani, del Instituto Francés de Investigación para la Explotación del Mar (IFREMER), y Victor Vescovo, de la empresa estadounidense Caladan Oceanic. Para llegar al fondo de la fosa marina —el aspecto más crítico de toda la investigación—, el equipo ha utilizado un submarino tripulado de alta tecnología: el Limiting Factor, un vehículo de sumersión profunda (en inglés, deep-submergence vehicle o DSV). Las imágenes aportadas por el Limiting Factor confirman que, aparte de acumularse en las costas, las aguas superficiales y los fondos más someros, los desechos marinos llegan también a los puntos más remotos y hondos del Mediterráneo, un mar especialmente afectado por las actividades humanas».

Siguiendo con la misma explicación: «La fosa de Calipso es una depresión situada a sesenta kilómetros al oeste de la costa del Peloponeso, en Grecia, dentro de la llamada fosa helénica, con varias depresiones similares, pero más someras. Ubicada en una zona de sismicidad elevada por las fallas activas, está rodeada de relieves escalonados bastante pronunciados y tiene desniveles de miles de metros, y un fondo prácticamente plano. La parte interna de la fosa, de más de cinco mil metros de profundidad, tiene forma de riñón y unas medidas aproximadas de veinte por cinco kilómetros. Pero ¿cómo ha podido llegar la basura a lugares tan profundos? Los desechos del fondo de la fosa de Calipso «provienen de diversas fuentes, tanto terrestres como marinas. Han podido llegar por varias rutas, que incluyen tanto el transporte a larga distancia por las corrientes marinas como el vertido directo», detalla Miquel Canals, catedrático del Departamento de Dinámica de la Tierra y del Océano y director de la Cátedra UB de Economía Azul Sostenible. «Parte de los desechos ligeros, como los plásticos, provienen de la costa, de donde se escapan hacia la fosa de Calipso, a tan solo sesenta kilómetros de distancia. Algunos plásticos, como bolsas, vagan justo encima del fondo hasta que quedan enterrados parcial o totalmente, o se desintegran en fragmentos más pequeños», apunta.  «También hemos encontrado evidencias del vertido desde embarcaciones de bolsas llenas de basura, tal como revela el amontonamiento de distintos tipos de desechos seguido de un surco casi rectilíneo. Desgraciadamente, en cuanto al Mediterráneo, no sería desacertado decir aquello de que “no hay ni un palmo limpio”», alerta el experto. La fosa de Calipso va atrapando y acumulando en el fondo los materiales antropogénicos que llegan hasta ella: «Es una depresión cerrada, lo que favorece que se acumulen desechos en su interior. Las corrientes tan débiles que hay en la fosa —de unos dos centímetros por segundo y, excepcionalmente, dieciocho— también facilitan la deposición de desechos ligeros en el fondo»».