El popular postre que le das a tu hijo y que deberías evitar a toda costa según una pediatra
Una pediatra advierte en redes sobre un postre que resulta de los más populares, también entre los adultos
El postre es uno de los momentos más esperados por los niños, y también por muchos adultos, tras la comida o la cena, ya que si bien se recomienda que sea algo ligero que además ayude a digerir lo comido previamente, muchas veces se relaciona también con algo dulce y apetecible. Y entre los muchos postres que suelen ofrecerse a los niños de forma habitual, hay uno que es de los que más les gustan, dado su sabor, y también su color y textura, pero que deberías mantener bastante alejado de nuestra nevera. Descubramos a continuación, cuál es el popular postre que le das a tu hijo y que deberías evitar a toda costa según una pediatra.
Si piensas que darle una pieza de fruta a tu hijo o hija como postre es lo más sano y saludable, estás del todo en lo cierto. Sin embargo, a veces los niños se resisten al sabor de determinadas frutas, especialmente las más harinosas o aquellas que tienen semillas, por lo que algunos padres buscan sustituto o postres que sean «similares» al hecho de darle fruta a los niños cuando en realidad no lo son.
El postre que no deberías dar a tus hijos según una pediatra
De entre todos los postres que puedes elegir para los niños, la gelatina es uno de los más recurrentes, pero lo cierto es que también es de los que debemos evitar a toda costa. Un postre dulce, que podemos encontrar con distintos sabores, y que suele gustar a todos los niños y del que podemos pensar además que es algo sano o con pocas grasas y calorías.
Sin embargo, la gelatina no es para nada aconsejable, tal y como ha explicado la doctora Lucía Galán Bertrand, conocida en las redes sociales como @luciamipediatra. En uno de sus recientes videos Galán ha explicado sobre las gelatinas que podemos encontrar en los supermercados, que tanto para los niños como para los adultos no dejan de ser «alimentos superfluos, artificiales», añadiendo además que «están cargados de conservantes, edulcorantes, muchas veces azúcares…» por lo en definitiva no deja de ser un alimento procesado por lo que puede acabar teniendo impacto en la salud del niño.
Según explica la pediatra, lo que hacemos si le damos una gelatina a nuestros hijos es que realmente estamos «engañando a nuestro cerebro, con alimentos, con sabores que no son naturales». Además añade que estos sabores lo que hacen es «maleducar al paladar y al cerebro» y de ahí que los niños acaben por encontrar que una pera o cualquier otra fruta tiene un sabor insípido.
La conclusión de @luciamipediatra sobre las gelatinas es clara: «No, no es un alimento para comprar todos los días» y tampoco para tener en la nevera y dar como postre a los más pequeños de la casa ya que el mejor postre que les podemos dar no es otro que la fruta.
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Cómo dar fruta a los niños y que no la rechacen
Puede que la gelatina sea uno de los postres más populares que existen pero mejor que acostumbremos a los niños, como dice esta pediatra, a que coman fruta siempre que puedan. Es el postre más rápido, sano y nutritivo que existe, pero puede que los niños sean reacios a tomarlo ya que les parecerá más atractivo el color, textura y sabor de la gelatina. ¿Qué hacer entonces? A continuación os ofrecemos algunas ideas que pueden servirte para que puedas hacer que tus hijos no rechacen la fruta:
- Hazlo divertido: Transforma el momento de comer fruta en una actividad divertida. Usa cortadores de galletas para darle formas interesantes a la fruta, como estrellas, corazones o animales. Presenta las frutas de colores brillantes en brochetas o haz un arcoíris de frutas en un plato. La presentación atractiva puede hacer que la fruta sea tan visualmente atractiva como la gelatina.
- Involucra a los niños en la preparación: Permite que tus hijos elijan qué frutas quieren comer y déjales ayudar en la preparación. Pelar, cortar (con supervisión y herramientas seguras) o mezclar frutas para hacer macedonias o batidos puede aumentar su interés en consumirlas.
- Añade un toque dulce o crujiente: Aunque las frutas son naturalmente dulces, un poco de yogur natural, un chorrito de miel, o un poco de granola pueden hacer que sean aún más apetecibles para los niños. También puedes añadir un toque de crema batida baja en azúcar para hacer la fruta más festiva.
- Haz helados o paletas de fruta caseras: Utiliza purés de fruta para hacer helados o paletas congeladas. Estos pueden ser una alternativa saludable a la gelatina y otros postres azucarados, ofreciendo la frescura y los nutrientes de la fruta en una forma que es familiar y excitante para los niños.
- Juega con texturas: Algunos niños prefieren ciertas texturas, así que ofrece una variedad. Desde frutas crujientes como manzanas y peras, hasta otras más suaves como plátanos y mangos. Descubre qué texturas prefieren tus hijos y adáptalas a su gusto.
- Educación nutricional juguetona: Usa libros, juegos y aplicaciones sobre alimentación saludable que incluyan frutas. Aprender sobre los colores, sabores y beneficios de las frutas de una manera lúdica y educativa puede motivar a los niños a probar y disfrutar de diferentes tipos.
- Establece el ejemplo: Los niños imitan a los adultos. Si te ven disfrutando de una variedad de frutas frecuentemente, es más probable que ellos también quieran probarlas.
- Regularidad y paciencia: Introduce la fruta como postre de manera regular y no te desanimes si al principio hay resistencia. La repetición y la consistencia son claves en la formación de hábitos alimenticios saludables.
Incorporando estas ideas, no solo ofrecerás alternativas más saludables a la gelatina, sino que también ayudarás a desarrollar en los niños un gusto duradero por las frutas.
Temas:
- Alimentación infantil