Los expertos no dan crédito: descubren una diminuta cápsula oculta dentro de la Virgen de Fátima española

En Málaga, una revisión técnica de conservación terminó en algo más que imprevisto. Lo que parecía una revisión de rutina de una figura religiosa reveló un elemento oculto en su interior que podría cambiar la comprensión sobre su origen. La Virgen de Fátima, pieza central en la devoción malagueña, es ahora objeto de análisis por un hallazgo que no figuraba en los registros.
Los detalles conocidos hasta ahora han captado la atención de historiadores, restauradores y especialistas en patrimonio.
Así descubrieron una diminuta cápsula oculta dentro de la Virgen de Fátima
El Hospital HM de Málaga fue escenario de un procedimiento poco común: una tomografía axial computarizada (TAC) aplicada a una figura religiosa. Se trata de la Virgen de Fátima, conocida localmente como la Peregrina, una escultura venerada desde hace más de siete décadas.
La iniciativa surgió en el marco de una restauración integral programada por la Hermandad responsable de su custodia, con motivo del 75 aniversario de su llegada a la ciudad.
El procedimiento de imagen no invasiva se eligió para obtener información técnica precisa sobre el estado interno de la talla. Este tipo de análisis permite identificar grietas, ensambles internos y posibles deterioros invisibles a simple vista, sin necesidad de intervenir directamente sobre la madera o comprometer su estructura.
Sin embargo, el resultado no solo aportó datos técnicos: dejó al descubierto la presencia de una cápsula diminuta alojada en el interior de la imagen.
Una cápsula dentro de la Virgen de Fátima: lo que podría tener dentro y la historia de la escultura
El hallazgo sorprendió tanto a técnicos como a historiadores. Según informaron fuentes del hospital, se trata de un pequeño contenedor, encajado de forma discreta en la estructura interna de la escultura.
Aunque aún no se ha procedido a su apertura, las primeras hipótesis apuntan a que podría contener algún tipo de documento manuscrito o mensaje vinculado con la autoría o la historia de la talla.
La Virgen de Fátima de Málaga fue esculpida en los años cuarenta por el artista portugués José Ferreira Thedim, el mismo que talló la figura original venerada en el santuario portugués de Fátima. La pieza andaluza forma parte de un reducido grupo de imágenes oficiales enviadas a distintos lugares del mundo durante la posguerra como parte de una misión evangelizadora.
De todas ellas, la ubicada en Málaga es la única que no fue devuelta a Portugal. Este carácter excepcional está ligado a la figura del entonces obispo Ángel de Herrera Oria, quien decidió que la imagen debía permanecer en la ciudad.
Desde entonces, la escultura se ha consolidado como un símbolo devocional profundamente arraigado en el tejido religioso malagueño.
¿Cuál fue la tecnología médica que le aplicaron a este patrimonio?
La utilización del TAC en piezas de arte sacro es una técnica cada vez más habitual en proyectos de conservación. Permite realizar un diagnóstico preciso del estado estructural sin intervenir directamente. La intervención en la Virgen de Fátima forma parte de una tendencia creciente que une tecnología médica con preservación del patrimonio.
Desde la dirección del hospital, la doctora Virginia Grando, ha señalado que para el Grupo HM supone una colaboración significativa. Aunque el hallazgo ha despertado el interés del ámbito religioso, también se valora su posible relevancia histórica.
«Para nuestro Grupo hospitalario es un honor colaborar en la conservación de una imagen tan querida por los ciudadanos», declaró Grando en relación con el proyecto.
Expectativas en torno al contenido de la cápsula
Por el momento, la cápsula permanece dentro de la imagen, a la espera de una decisión sobre su apertura. No se ha descartado que contenga un texto explicativo, una nota del autor o algún elemento que pueda aportar datos sobre la creación de la talla. La Hermandad ha recalcado que cualquier intervención deberá asegurar la integridad estructural de la imagen.
Este tipo de cápsulas insertadas en figuras religiosas no son frecuentes, pero tampoco inéditas. En algunos casos, se han utilizado para introducir reliquias, notas de consagración o documentos con datos sobre el proceso de fabricación.
La cápsula hallada en la Virgen de Fátima de Málaga podría responder a uno de estos fines, aunque será necesario un análisis más detallado para confirmar su contenido y finalidad.
A la espera de nuevas decisiones, el caso pone de relieve cómo las tecnologías actuales permiten explorar de forma no invasiva los secretos que pueden guardar piezas patrimoniales de alto valor simbólico. Además, plantea nuevas preguntas sobre los métodos utilizados en la creación de esculturas religiosas en el siglo XX y las posibles intenciones de sus autores.