Náuseas del embarazo: Cómo reconocerlas y cómo tratarlas

Muchas mujeres embarazadas (alrededor del 70% al 85%) experimentan un período de náuseas y vómitos especialmente al inicio del embarazo. En la gran mayoría de los casos, estos síntomas son desagradables, pero no peligrosos. Sin embargo, es importante saber reconocer las náuseas del embarazo (para descartar que se deban a otra cosa)  y también tratar de aliviarlas de la mejor manera.

Náuseas del embarazo: ¿Cómo reconocerlas?

Uno de los primeros síntomas del embarazo son las náuseas matutinas que suelen ir acompañadas de un ligero mareo e incluso de dolores como el de barriga o hasta el de cabeza, pero también en algunas ocasiones puede que esas náuseas tengan otro origen que nada tiene que ver con el embarazo.

La clave para diferenciar las náuseas del embarazo del resto de náuseas será evidentemente hacerse un test de embarazo, y de este modo confirmar o no el estado de buena esperanza. Por otro lado saber que nuestras náuseas se deben a un embarazo nos permitirá salir de dudas en el caso de que estas incluyan además pérdida de peso y deshidratación, dado que también se puede producir una forma grave de náuseas matutinas durante el embarazo que se denomina hiperémesis del embarazo . Aunque esta afección, si no se trata, puede poner en peligro la vida, una breve estadía en el hospital suele ser suficiente para descartarla.

Por otro lado, cuando mujer sufre de náuseas matutinas producidas por un embarazo, pueden ser lo suficientemente graves como para afectar las actividades diarias habituales (por ejemplo, el trabajo, el cuidado de los niños). Además, aunque se denominan «náuseas matutinas», las náuseas y los vómitos pueden ocurrir en cualquier momento del día.

¿Cuáles son las causas de las náuseas del embarazo?

Se desconocen las causas exactas de las náuseas matutinas durante el embarazo, pero es probable que estén relacionadas con las hormonas del embarazo. Las mujeres que experimentan náuseas matutinas generalmente tienen niveles más altos de estas hormonas que otras.

Es posible que las náuseas y los vómitos durante el embarazo sean un mecanismo antiguo que estaba destinado a proteger al feto de los venenos. Teniendo en cuenta la gran riqueza y variedad de alimentación en comparación con la de nuestros antepasados, no es de extrañar que un sistema de protección de este tipo esté más o menos desequilibrado y rechace diversos alimentos que, sin embargo, son saludables.

Una de las pistas detrás de esta hipótesis proviene de investigaciones que muestran que las mujeres con vómitos durante el periodo de gestación tienen una menor tasa de abortos espontáneos. La investigación muestra concentraciones más altas de dos hormonas (tiroxina y gonadotropinas coriónicas humanas) en mujeres que experimentan náuseas. Por otro lado las mujeres en las que los anticonceptivos orales causan náuseas tienen más probabilidades de experimentar náuseas matutinas durante el embarazo.

¿Cuáles son los síntomas y complicaciones en las náuseas del embarazo?

Como ya hemos comentado, las náuseas matutinas no ocurren necesariamente por la mañana. A menudo son más pronunciados entre las 09:00 horas y el mediodía, pero pueden continuar durante todo el día o aparecer en varios momentos. El vómito es más común después de las comidas.

Este trastorno generalmente ocurre muy temprano en el embarazo. Algunas mujeres comienzan a vomitar a los pocos días de la concepción, pero las náuseas suelen aparecer seis semanas después del final de su último período. Los vómitos suelen ir precedidos de náuseas durante una semana o dos.

¿Cuánto duran las náuseas matutinas?

Aproximadamente el 80% de las mujeres afectadas se sienten mejor en la semana 12 de embarazo y la mayoría dejará de vomitar después de las 16 semanas. En algunos casos, las náuseas regresan poco antes del parto. Al igual que las náuseas en sí, esta no es una señal peligrosa o dañina. Muy pocas mujeres experimentan náuseas matutinas durante el embarazo y este fenómeno, repetimos, es desagradable, pero inofensivo.

¿Qué es las hiperémesis del embarazo?

La hiperémesis del embarazo son en realidad náuseas matutinas lo suficientemente graves como para afectar la dieta de la madre y, por lo tanto, la salud del bebé. Los vómitos pueden dañar el hígado y los riñones. Afortunadamente, la mayoría de las mujeres embarazadas son monitoreadas de cerca por el médico y estas complicaciones casi siempre se detectan rápidamente.

Diagnóstico para las náuseas de la mujer embarazada

Las náuseas matutinas no son una enfermedad y no requieren pruebas de diagnóstico complejas. Es probable que el médico le diga a las mujeres embarazadas que experimentan vómitos (o que se sienten constantemente a punto de vomitar) que se trata de náuseas matutinas, incluso si los vómitos ocurren por la noche o en cualquier otro momento del día.

Independientemente de la gravedad de los vómitos, el diagnóstico de hiperémesis del embarazo solo se realiza si hay pérdida de peso o signos de deshidratación grave.

¿Cómo tratar las náuseas matutinas del embarazo?

La mejor manera de tratar las náuseas matutinas es comenzar con medidas no farmacológicas. A continuación, os vamos a dejar algunas sugerencias que son útiles en muchos casos:

• Por la mañana, evita cualquier esfuerzo físico antes de llenar su estómago;
• Traga algo antes de levantarte si eres propensa a las náuseas matutinas cuando tu estómago está vacío, y ten agua y un refrigerio en tu mesita de noche;
• Comer pequeñas comidas a lo largo del día, en lugar de consumir comidas abundantes;
• Limítate a los platos que te dan ganas y olvídate de platos demasiado exóticos, porque son difíciles de digerir y generan olores fuertes. Cuanto más neutral sea el alimento, más probable es que pase;
• Evitar los alimentos ricos en grasas y, en cambio, es mejor tomar carbohidratos simples como las papas y el arroz;
• Opta por una cocción suave (vapor, horno, papillote…), y luego agrega aceite, para evitar alimentos cocidas indigeribles y olores desagradables de cocción;
• Evita el dulce por la mañana, prefiere un desayuno neutro o salado;
• Toma infusiones que sirvan para poder alivia las náuseas como la de jengibre o la de limón.
• Consume sopas, jaleas, bebidas de cola y otras bebidas carbonatadas, así como infusiones dulces de hierbas;
• Come algunas galletas en la cama antes de levantarse por la mañana;
• Lleva contigo galletas saladas o alimentos similares: es importante no mantener el estómago completamente vacío para no aumentar las náuseas;
• Evita aquellos que provoca las náuseas, como ciertos olores de alimentos;
• Evita las vitaminas prenatales y tome solo ácido fólico;
• Evita beber durante las comidas;
• Evita los alimentos fritos, ácidos y picantes.
• No te acuestes  inmediatamente después de comer.
• Pon en marcha alternativas para mantener una buena ingesta alimentaria y evitar carencias (por ejemplo, yogur si ya no puedes soportar queso o leche, huevos o jamón si evitas las carnes rojas, compotas si ya no te entra la fruta fresca …);
• Ventila las habitaciones en las que te encuentres, respira profundamente y evite los olores fuertes.

Otros remedios naturales que os podemos enumerar son estos: 

Vitaminas y minerales

• Bicarbonato de sodio: entre sus muchas virtudes, el bicarbonato de sodio es capaz de aliviar las náuseas. Puedes preparar por un lado un vaso de agua que contenga el jugo de un limón y por otro lado un vaso de agua (150ml) que contenga una cucharadita de bicarbonato de sodio. Tom un sorbo de cada solución sucesivamente, comenzando con el agua con bicarbonato de sodio. Repite esta operación varias veces al día hasta que mejoren los síntomas.
• Magnesio: considere preguntarle a tu médico si quizás tienes deficiencia de magnesio, ya que es una de las causas de las náuseas del embarazo. Puedes encontrar magnesio en forma de suplementos dietéticos, pero también puedes aumentar sus reservas a través de su dieta. La alta concentración de magnesio se encuentra en determinadas aguas minerales, frutos secos y frutos secos, verduras de hoja verde oscuro como las espinacas, cereales integrales y mariscos.
• Vitamina B6: varios estudios científicos han demostrado que la vitamina B6 ha mostrado resultados prometedores para aliviar las náuseas. En Canadá, la vitamina B6 es incluso uno de los ingredientes principales de un medicamento recetado que se prescribe muy a menudo a mujeres embarazadas que sufren náuseas y vómitos.

Aceites esenciales

Los aceites esenciales de limón y jengibre son seguros durante el embarazo y se pueden tragar.

Diluye una gota en una cucharadita de miel, en un terrón de azúcar o en una tableta neutra y deja que la mezcla se derrita en tu boca, hasta 5 veces al día dependiendo de la intensidad de tus náuseas.

También puedes hacerte un masaje con aceites esenciales anti-náuseas como este: Mezcla dos gotas de aceite esencial de estragón o albahaca exótica con dos gotas de aceite vegetal de avellana y luego aplica en masaje sobre el plexo solar. Repite este masaje hasta cinco veces al día dependiendo de la intensidad de tus náuseas.

Por último, algunas mujeres usan la acupresión, un remedio casero común para las náuseas. Esto implica usar una pulsera elástica con un botón que debes poner aproximadamente cinco centímetros por encima de la muñeca en su lado interno. Algunas personas dicen que la compresión allí alivia las náuseas, y el mareo en aquellas personas que se marean al viajar. Sin embargo, su eficacia no ha sido bien estudiada con respecto a las náuseas matutinas.

Náuseas y vómitos durante el embarazo: ¿cuando consultar?

Como ya hemos dicho, las náuseas durante el embarazo son frecuentes, debido a la presencia más o menos marcada de hormonas del embarazo en la sangre, y suelen pasar durante el segundo trimestre. Habla con tu médico o partera si se acompañan de vómitos y / o pérdida significativa de peso y / o deshidratación y falta de apetito. Si es necesario, te recetará antieméticos para su alivio, controlará tu condición para detectar convulsiones graves y se asegurará de que no afecte al bebé.