Mallorca sigue batiendo récords en los saturados centros de acogida: 419 menas tutelados

El Consell de Mallorca sigue batiendo récords en los saturados centros de acogida de menores inmigrantes no acompañados (menas): ya son 419 los que atiende la red pública de la institución insular después de que en los primeros seis meses del año llegaran 105 más, superando los 93 que lo hicieron en estas mismas fechas el año pasado.

De hecho esta población supone ya en líneas generales más de 75% del total de menores tutelados. Es decir, tres de cada cuatro menores acogidos por el Consell de Mallorca son menas. Un número impensable antes del año de la pandemia de la Covid en 2020 ya que, desde entonces, la llegada de menas a Mallorca se ha disparado un 625 % como ya reveló el presidente insular Llorenç Galmés la pasada primavera.

Lo hizo en una carta remitida al ministro socialista de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, para solicitar al Gobierno que reclame la ayuda de la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex) con el fin de evitar la llegada de pateras a la isla.

Una petición que como todas quedó en nada, ante un Gobierno como el del socialista Pedro Sánchez que está aplicando una política de puertas abiertas a la inmigración ilegal procedente de Marruecos, y en el caso de Mallorca, desde Argelia.

La falta de medidas efectivas ha convertido al archipiélago en una ruta consolidada de inmigración ilegal, lo que hace aún más urgente la adopción de acuerdos para poner coto a esta realidad. Entre otras cuestiones, porque el sistema de acogida atención y cuidados para esta población (gestionado por el IMAS) está saturado, pues los centros (una decenas en la Isla) trabajan por encima del 40% de su capacidad.

Y a ello hay que sumar el gasto público que esto representa, en torno a 30 millones de euros este año: 24 millones presupuestados por el Consell a los hay que sumar seis millones adicionales procedentes de los remanentes de tesorería de 2024 aprobados en abril de este año.

En el caso de Baleares, que acoge actualmente a en torno 550 menas cuando, en teoría, sólo tiene 57 plazas disponibles, hay una sobreocupación en los centros de acogida del 1.023%. 

Y el número puede ir a más en próximas fechas, si la ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, materializa en agosto el traslado de 58 menas a Baleares procedentes de Canarias acordado entre Sánchez y Puigdemont.

Un reparto al que se oponen Govern y Consell de Mallorca al ser Baleares ya una comunidad receptora por la consolidación de la ruta migratoria procedente de Argelia, y por la acuciante falta de espacios y profesionales para su correcta y adecuada atención.

Una nueva afrenta en toda regla del Gobierno del socialista Sánchez a Baleares agravado aún más, por los apenas dos millones de euros que transferirá al Ejecutivo balear para su manutención y cuidado. Cifra ridícula si tenemos en cuenta los más de 30 millones que sólo el Consell de Mallorca destinará este año a este fin.

Y más aún si tenemos en cuenta que Cataluña en ese reparto pactado entre Junts y PSOE, apenas acogerá a 26.

Por contra en Baleares serán más del doble los trasladados, pese a que la inmigración ilegal creció un 168% en 2024 con un total de 5.846 inmigrantes irregulares, cifra que todo apunta seguirá creciendo este año si tenemos en cuenta que, entre enero y junio de 2025, ya son más de 2.700 los inmigrantes ilegales llegados en pateras a las costas de las Islas.