Afedeco aplaude que la remodelación del puerto de Palma no amplíe la zona comercial
Considera que es un paso en la dirección correcta para el equilibrio entre el desarrollo del puerto y la protección del comercio
Avala que se evite la apertura de nuevas superficies comerciales en una zona clave de la ciudad para el turismo y el ocio
La patronal del comercio Afedeco ha expresado su apoyo a la decisión del Gobierno y la Autoridad Portuaria de Baleares (APB) de no expandir la actividad comercial en la remodelación del puerto de Palma.
Esta medida representa para la asociación una noticia positiva para el comercio de Palma, al evitar la apertura de nuevas superficies comerciales en una zona ya clave para el turismo y el ocio.
Todo ello después de que el consejo de administración de la Autoridad Portuaria de Baleares (APB) aprobara este miércoles la redacción de estudios y proyectos de una nueva propuesta de configuración de infraestructuras y usos del puerto de Palma
En un comunicado, la patronal ha subrayado que una ampliación de la actividad comercial en el puerto supondría una competencia directa para los comercios del centro de la ciudad, muchos de los cuales se han visto ya afectados en los últimos años por el auge de los grandes operadores y los cambios en los hábitos de consumo.
La preservación del centro como el principal eje comercial es crucial para la economía local, han añadido, y para el mantenimiento de los comercios de proximidad, que representan una parte fundamental de la identidad y oferta única de Palma.
«Esta decisión es un paso en la dirección correcta para mantener el equilibrio entre el desarrollo del puerto y la protección del comercio local», ha señalado la presidenta de Afedeco, Joana Manresa
La solución del organismo portuario para la configuración del nuevo puerto de la capital balear deberá contemplar los cuatro ejes que se han consensuado con todos los grupos de interés consultados durante los últimos meses. En primer lugar, mantener la simultaneidad de las operaciones portuarias en los muelles comerciales, muelles de Poniente-Paraires y dique del Oeste, tal y como se opera en estos momentos.
Este aspecto aleja la amenaza de congestión de la operativa portuaria de embarque y desembarque de mercancías y pasajeros, sobre todo en horas punta de la mañana.
En segundo lugar, reubicar el espacio destinado a los cruceros, concentrando su actividad en el muelle de Poniente-Paraires. De forma paralela y en la medida que vaya siendo compatible con el mantenimiento de las operaciones portuarias en cada zona, la propuesta promoverá también el traslado progresivo de las áreas de reparación y mantenimiento a la zona del dique del Oeste y dentro de las aguas abrigadas del puerto.
La nueva configuración desarrollará un proyecto de integración entre el puerto y la ciudad en los espacios liberados por la industria de la reparación de embarcaciones situados frente a la Catedral y en el Contramuelle-Mollet. Ambos espacios serán destinados a iniciativas relacionadas con la cultura, la formación y especialmente el deporte, priorizando valores como el esponjamiento de la ciudad y la cesión de espacios de calidad para uso ciudadano.