Tres policías comen «por error» unas gominolas con droga que habían incautado y acaban en el hospital
El suceso tuvo lugar en el marco de una operación llevada a cabo por efectivos de la Brigada de Policía Judicial de Málaga
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Un insólito incidente ha sacudido a la Policía Nacional de Málaga tras un operativo antidroga que acabó con tres agentes en el hospital. El motivo: los agentes resultaron intoxicados tras consumir, supuestamente «por error», unas gominolas impregnadas de sustancias estupefacientes que habían sido incautadas durante una actuación policial en la localidad de Fuengirola, en la provincia de Málaga.
Los hechos, que ocurrieron la pasada semana pero se han hecho públicos este martes, han generado sorpresa tanto dentro como fuera del cuerpo policial. El suceso tuvo lugar en el marco de una operación llevada a cabo por efectivos de la Brigada de Policía Judicial de Málaga. Los agentes se desplazaron hasta un club cannábico en Fuengirola para realizar un registro. Durante la intervención, incautaron diversos objetos y sustancias que, bajo la apariencia de caramelos o gominolas, se sospechaba que podían contener estupefacientes.
Estos productos, diseñados para pasar desapercibidos, fueron trasladados a las dependencias de la comisaría de Málaga, donde se procedió a etiquetarlos y precintarlos como parte del protocolo habitual. Sin embargo, una de las bolsas quedó aparentemente fuera del proceso, lo que desencadenó el curioso incidente.
La intoxicación ocurrió cuando otro grupo de agentes, que regresaba de una intervención en la vía pública, entró en la sala de coordinadores de la comisaría. Al ver la bolsa de gominolas sin identificar, los policías, sin sospechar su contenido, decidieron consumirlas. Poco después, tres de ellos comenzaron a sentirse mal, experimentando síntomas que los obligaron a buscar atención médica urgente.
Tras ser trasladados al hospital, los análisis confirmaron que habían ingerido una sustancia estupefaciente. Los agentes fueron tratados y, afortunadamente, recibieron el alta horas más tarde, sin que se reportaran consecuencias graves para su salud.
Este incidente pone de manifiesto los riesgos asociados al manejo de sustancias incautadas, especialmente cuando se presentan en formatos tan poco convencionales como golosinas. Aunque no se han detallado las medidas que tomará la Policía Nacional tras este episodio, el caso ha generado debate sobre los protocolos de seguridad y la necesidad de extremar precauciones en este tipo de operativos. Por ahora, los tres agentes se recuperan satisfactoriamente, dejando tras de sí una anécdota que, pese a su gravedad inicial, ha sorprendido por lo inusual de la situación.
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